Niños sin profesores o hasta tres maestros para una misma plaza: caos en la red pública vasca por una plataforma telemática

Suena el despertador. Son las 7:15 y Vanessa, como cada mañana, revisa la plataforma Ordezkagune de gestión telemática -antes se realizaba a través de llamadas telefónicas- de sustituciones en la enseñanza pública vasca. Las listas se renuevan todos los días, pero el sistema no avisa a los profesores de si se les ha asignado una plaza o no, tienen que ir mirándolo ellos mismos a cada hora. Nada. Vanessa sigue sin contar con una plaza en la que poder enseñar, ahora, le toca esperar hasta las 13:30, hora en la que la página vuelve a actualizarse. De no ser así, a las 16:30 publican las plazas definitivas de ese día. Mientras, afirma, algunos de sus colegas se han encontrado con colegios en los que para una misma plaza han adjudicado a tres profesores diferentes y otros, en los que aún, a finales de septiembre, los alumnos no cuentan con profesores. 

Los colegios cierran a las 16:30 y desde la Delegación, aseguran todos los profesores consultados por este periódico, “llevan semanas sin contestar el teléfono porque las líneas están colapsadas”. Por lo tanto, en el caso de contar con una plaza adjudicada para el día siguiente - ha habido casos en los que a las 10 de la noche se enteran de que a la mañana siguiente tienen que comenzar a dar clase en un colegio- no tienen manera de hablar con la escuela o con algún responsable para informarse de los errores que ha podido generar la plataforma. “Quien ha tenido suerte, va totalmente a ciegas”, sentencia Vanessa. 

Ese es el caso de dos profesores de la escuela Mujika Eskola, en Bilbao, que tras llevar trabajando desde el 2 de septiembre, el pasado miércoles 25 les han indicado que sus puestos de trabajo “no existen” y que no estaban dados de alta en la Seguridad Social. Para aclarar sus dudas y contar su experiencia al respecto, los más de 200 profesores de la enseñanza pública afectados han creado un grupo de Facebook en el que cada día van relatando las plazas que siguen sin adjudicar y comprobando si la plataforma contiene algún error, ya que en la mayoría de los casos las plazas vacantes y las asignadas no coinciden para todos ellos.

“Hay niños que todavía no tienen profesores desde principios de curso. Somos profesores que queremos trabajar y aún hay puestos sin cubrir. Con esto se están ahorrando ese dinero. Además, no estamos recibiendo ninguna información oficial acerca de la asignación de plazas, solo lo que vamos contándonos por Facebook, me parece una auténtica vergüenza”, ha indicado la profesora a eldiarionorte.es.

“Ordezkagune funciona de forma adecuada”

Por su parte, la consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte, aseguró el pasado martes 24 de septiembre que “tras los problemas registrados inicialmente, que han afectado a unos 200 profesores, el sistema Ordezkagune ya funciona de forma adecuada, por lo que ha rechazado suspender su uso, tal y como le ha pedido EH Bildu”. Añadió que los “problemas” iniciales ya han sido resueltos o están en vías de arreglarse, y defendió que se trata de una herramienta “eficaz y transparente”.

“La plataforma funciona y no tenemos intención de suspenderla”, aseguró Uriarte, en respuesta a la petición de EH Bildu para que Ordezkagune sea cerrado hasta que no se resuelvan los fallos detectados en el sistema.

Sin embargo, como ha podido comprobar eldiarionorte.es los profesores siguen encontrando dificultades con la plataforma. Mertxe Sánchez, de 40 años, reconoce que lo que más le molesta es que “no sean capaces de asumir que han cometido un error y que no han buscado soluciones hasta después”.

“Es una auténtica tomadura de pelo, así de claro, una auténtica vergüenza, vergüenza en mayúsculas. Ordezkagune es un programa vergonzoso y peligroso también, porque juegan con la vida de la gente. Lo que queremos es que esto no se vuelva a repetir. Noches sin dormir, que llegue septiembre y no saber dónde vas a trabajar o si vas a trabajar o no...En general lo que nos ha ocurrido a los afectados es que no haya habido un reconocimiento de decir bueno, es el primer año que lo ponemos en marcha y somos humanos y buscar una solución, pero no han buscado soluciones hasta después”, ha señalado a este diario.