No habrá salidas a casas de familiares: las diputaciones matizan la flexibilización del protocolo de residencias anunciado por el Gobierno vasco

El vasco es el único Gobierno autonómico sin competencias en residencias. En Euskadi, esa gestión la llevan a cabo las tres diputaciones forales, cuyas áreas de Servicios Sociales copan buena parte del presupuesto anual. Este martes, sin embargo, la nueva consejera de Salud, Gotzone Sagardui, en la que constituyó su primera comparecencia pública tras el nombramiento, quiso destacar que el Ejecutivo había impulsado una actualización del protocolo para los centros de mayores en busca de combinar “condiciones de seguridad elevadísimas” con más humanidad y “cariño” en lo tocante a visitas y salidas, citando incluso posibles estancias en hogares familiares. Pero desde Álava, Bizkaia y Gipuzkoa han matizado en las últimas horas estas intenciones y, aunque flexibilizarán algunas medidas -sobre todo en el caso de Álava-, no se prevén estancias en espacios cerrados o domicilios. En Euskadi hay unos 300 casos activos de coronavirus en estos recursos.

Álava y Gipuzkoa complementaron el anuncio de Sagardui el mismo martes con una reflexión idéntica en la que dejaban claro que hay que evitar “en todos los casos” los espacios “cerrados y concurridos”. Dejarán salir a los residentes pero no a la casa de un pariente. Se priorizarán los “paseos terapéuticos, un máximo de dos veces por semana alrededor del centro residencial, con una duración de una hora y con el acompañamiento de un máximo de dos personas por residente”. Las visitas también estarán permitidas, pero con el tope de una persona por anciano, con un tiempo máximo de 60 minutos y, como mucho, dos veces a la semana. Eso sí, unas y otras opciones quedan limitadas a los centros donde no haya brotes. Bizkaia sí menciona más supuestos y “excepciones” a la norma, pero tampoco plantea expresamente posibles salidas a domicilios. De hecho, recoge también que “prioritariamente” se realizarán paseos en zonas abiertas.

Las tres diputaciones, eso sí, coinciden en que el protocolo se tiene que ajustar a la realidad y necesidades de cada centro. En los tres casos, las residencias elaborarán una guía de actuación que tendrá que ser supervisada por los inspectores forales correspondientes. Bizkaia entiende “fundamentales” las relaciones sociales de los mayores como garantía de su “bienestar emocional”. Cree imprescindible dar todos los pasos posibles para “minimizar” los efectos negativos de los “confinamientos” prolongados, aunque incide en que siempre dentro de las “limitaciones necesarias para evitar la expansión de la COVID-19”.

En este contexto, los fallecimientos siguen aumentando en las residencias. Las diputaciones han comunicado seis más en 24 horas y el total estimado en la pandemia es de 702 muertes entre mayores. Tres de los casos son de Bizkaia que acumula 51 de los decesos desde agosto, desde que se iniciara la segunda ola de COVID-19. Allí hay focos activos en 12 instalaciones con 214 infectados en total, según el último parte de la Diputación. 32 de ellos están hospitalizados y 84 derivados a Birjinetxe, el centro de referencia. Además, hay 112 positivos más entre gerocultores.

Precisamente Gipuzkoa ha actualizado el dato de afección de la enfermedad entre sus profesionales de residencias. Son 60 trabajadores de una veintena de centros. Son 55 los activos entre mayores, que proceden de 5 centros. 11 de ellos están ingresados y 29 derivados a una planta del hospital de Eibar, el centro de referencia para el aislamiento de casos más leves. Los dos últimos fallecidos correspondientes a Gipuzkoa procedían de Alai-Etxe, en Donostia.

En el caso alavés, el fallecido era de Colisée Miñano, un centro privado en el que ya murió una persona también en la primera ola. Se estima en 15 los casos que continúan activos en esta residencia. La Diputación de Álava, en su último informe, ha destacado que ya son 60 las personas recuperados -por 10 las fallecidas, incluido un usuario de un centro de día-, 18 de ellas en las últimas horas. En Jesús Guridi, por ejemplo, ya no quedan casos tras haber habido hasta 10 contagios.