El presidente del BBVA, Carlos Torres, ha querido poner en valor el “importante papel de la banca en la sociedad” como “promotor del crecimiento económico”. “Prestamos un servicio esencial”, ha dicho ante la Junta de Accionistas celebrada este viernes en Bilbao. En un momento en el que está sobre la mesa si el impuesto a la banca deja de ser temporal para convertirse en una tasa fija, Torres ha reivindicado la contribución de la banca al crecimiento y al bienestar social al margen de esta tasa. “Promovemos el crecimiento económico, canalizando el ahorro hacia la inversión productiva. Porque nuestra financiación es necesaria para que se lleven a cabo las inversiones, que son el motor de la productividad, de la creación de empleo, del crecimiento económico y social. Esta es la forma más importante en la que los bancos contribuimos a la sociedad”, ha señalado.
Torres ha reivindicado el papel de la banca como motor del crecimiento tras cerrar un ejercicio que él mismo ha calificado de “histórico”, con los “mejores resultados hasta la fecha”. El banco ha cerrado 2023 con unos beneficios de 8.019 millones de euros, lo que le coloca “a la cabeza en Europa en rentabilidad y eficiencia”, ha señalado. “El mercado reconoce estas fortalezas. La capacidad de beneficiar, de combinar crecimiento y rentabilidad nos diferencia de nuestros competidores”, ha señalado. Además, incorporó más de 11 millones de nuevos clientes e incrementó su cartera de préstamos un 7,6%.
Durante la Junta, en el centro del discurso de Torres, se ha emitido un vídeo en el que se ha recordado que paga un tercio de sus beneficios en impuesto de sociedades y que muchos de sus beneficios se vuelcan en la sociedad. En este sentido, ha recordado que el banco destinó 15.000 millones de euros a proyectos que fomentan el crecimiento inclusivo, como la financiación de infraestructuras sostenibles, el apoyo al emprendimiento o la inclusión financiera. “La financiación a familias y empresas es nuestra mayor contribución al progreso de las sociedades en las que estamos”, ha señalado.
El presidente del banco ha exhibido satisfacción ante sus accionistas por la subida del precio de la acción del 81% desde enero de 2023 y por la distribución de más de 4.000 millones de euros, la mitad del beneficio de 2023. Una distribución de los beneficios entre los accionistas que realizará mediante el pago de un dividendo en efectivo y mediante un programa de recompra de acciones por importe de 781 millones de euros, que está ya en curso, y que se suma a las recompras realizadas en 2023 por importe de 1.422 millones de euros. Una recompra de acciones destinada a aumentar la rentabilidad de las acciones para los accionistas. Es decir, promover el “crecimiento del dividendo por acción a futuro”.
Este crecimiento de los resultados del banco y de la rentabilidad se mantendrá durante este año, según ha vaticinado Torres. En su discurso ante la Junta, Torres ha confiado en que a lo largo de 2024 la economía continúe creciendo, “aunque de forma más moderada que en 2023”, por lo que el banco espera en 2024 seguir creciendo y tener “mayor impacto positivo en la sociedad, creando oportunidades para todos”.
Respecto a la evolución de la economía Torres ha señalado que España “ha demostrado ser una economía resistente y seguirá creciendo muy por encima de la media europea en 2024, estimamos que al 2,1% frente al 0,7% de la eurozona”. Un crecimiento “menor que el de 2023 principalmente por la menor demanda de la eurozona, la necesidad de ajuste fiscal y unos tipos de interés todavía en niveles relativamente elevados. Pero estará soportado por la fortaleza del empleo y del consumo, la aportación de las exportaciones, así como por un mayor dinamismo de la inversión, ante la expectativa de menores tipos de interés y del despliegue de los fondos europeos”, ha dicho.
Aunque Torres ha reconocido en su discurso que el crecimiento del banco se debe al “trabajo de las más de 120.000 personas que forman BBVA” -“a quienes me gustaría reconocer por su profesionalidad, su dedicación y esfuerzo, y su compromiso con nuestros valores”-, los sindicatos quieren otro tipo de reconocimiento.
En la entrada del Palacio Euskalduna se han concentrado representantes de CCOO, UGT y FINE para exigir un “convenio justo” de banca que permita “la recuperación salarial y una mejora de condiciones laborales” en el sector bancario. Entre los asistentes se encontraba la secretaria general de CCOO Euskadi, Loli García, y han desplegado tres pancartas en las que se recogían algunas de sus reivindicaciones. Esta movilización se une a las celebradas los días 8 y 21 de febrero, la huelga parcial del día 26, y la huelga convocada de 24 horas del próximo viernes 22 de marzo en el sector.
Durante el turno de ruegos y preguntas también se han dejado notar las reivindicaciones de la plantilla con las intervenciones de varios sindicatos. En ellas, han recriminado al presidente que su salario sea 177 veces más elevado que el de la media de la plantilla, mientras que “los trabajadores están con el sueldo congelado desde hace años” y que no se atiendan las peticiones de la plantilla. Torres ha recordado en su turno de respuestas que el banco ya ha intentado aplicar subidas salariales para paliar la inflación.
También ha habido varias intervenciones en las que se ha pedido al banco responsabilidades por sus relaciones con empresas armamentísticas y por la financiación de empresas relacionadas con Israel y con su actuación en el “genocidio de Gaza”. El presidente ha lamentado la situación humanitaria en la zona, pero ha señalado que el banco no tiene presencia en Israel.
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