Podemos presiona al PSOE para que el Gobierno ponga 10 millones y compre los activos de La Naval de Sestao, un astillero centenario en liquidación

Esta semana, La Naval de Sestao, un astillero vasco con una historia centenaria, se ha acercado un poco más a su final definitivo. Privatizado en 2006 y en concurso de acreedores desde 2017, en estos días ha finalizado el plazo de presentación de ofertas para retomar la actividad de una empresa llamada realmente Construcciones Navales del Norte. Se abre ahora un nuevo escenario en el que los activos del astillero podrán ser liquidados de manera troceada y ya se habla de que parte de los hasta 300.000 metros cuadrados de las antiguas instalaciones –42 campos de fútbol– podría convertirse en un polígono logístico. En este contexto, Unidas Podemos está presionado a su socio en el Gobierno de España, el PSOE, para que ponga 10 millones sobre la mesa y puje por esos activos.

Hace justamente dos años, el ahora vicepresidente y líder de Podemos, Pablo Iglesias, acudió a una manifestación de protesta por el cierre de La Naval con trabajadores del astillero. El lema de la pancarta era “Rescate” y, en este tiempo, la formación morada ha encabezado una petición para una 'suerte' de renacionalización de La Naval. Esa fase parece ya superada: los operarios que se mantenían desde la época previa a 2006 han tenido ocasión de ser recolocados en Navantia, la nueva entidad pública gestora de astilleros, pero el resto hasta 173 ya está despedido. No obstante, su diputado por Bizkaia, Roberto Uriarte, encabeza las peticiones a sus socios socialistas para que el Estado puje al menos para quedarse con los activos en este fase de liquidación. “Si se van a regalar activos a un fondo especulativo, mejor que los compre el Estado. Alguien se lo va a quedar a precio de saldo, pues que sea el Estado”, explica Uriarte, que remarca que “la situación es delicada porque no quedan muchos días” y emplaza al Gobierno central a que tome ya cartas en el asunto.

Según ha podido constatar este periódico, en el marco de las conversaciones presupuestarias de cara a las cuentas de 2021 se han producido reuniones específicas sobre La Naval entre altos cargos del equipo de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y una delegación de Unidas Podemos. El lehendakari entre 2009 y 2012 y también diputado por Bizkaia Patxi López ha ejercido de enlace. Unidas Podemos se ha dirigido a Hacienda porque de ella depende la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), gestora de Navantia. En esas reuniones se ha puesto sobre la mesa una cifra de alrededor de 10 millones de euros.

Sin embargo, fuentes socialistas indican que esta propuesta de intervención ha sido acogida con “frialdad” por parte de Hacienda. En el área de Desarrollo Económico y Medio Ambiente del Gobierno vasco, dirigida por Arantxa Tapia (PNV) y que ha monitorizado la situación de La Naval en estos años, también consideran inviable una propuesta semejante y recuerdan que ya se ha descartado en anteriores ocasiones cuando Podemos ha solicitado un rescate público para el astillero. Las ayudas de Estado son especialmente vigiladas por la Unión Europea y, en el caso de los astilleros, está el precedente de la sentencia contra el denominado 'tax lease'. Uriarte, por el contrario, se agarra a que el contexto es otro. Durante la pandemia –alega–, en varios países de Europa ha habido una “rectificación importante” en su política industrial y han adoptado un papel más “activo”. Cita los ejemplos de Francia, de los Países Bajos –“han puesto 200 millones para los astilleros”– o de Escocia. “Tenemos que hacer algo. Es estratégico. Es el astillero más importante del Cantábrico”, clama el diputado.