Las expectativas para EH Bildu eran altas: ganar por primera vez las elecciones autonómicas vascas. Un reto complicado teniendo en cuenta el peso del PNV en Bizkaia, donde su hegemonía cuenta con una trayectoria de más de 40 años. Puede que por eso el emplazamiento en el que han vivido la noche electoral parlamentarios, alcaldes, miembros y militantes de la coalición abertzale ha sido esta vez Bilbao, cuando la anterior fue en Donostia. Así, desde última hora de la tarde el mercado del Ensanche se ha ido llenando de políticos, militantes y periodistas. Un amplio despliegue de radios, televisiones, prensa escrita y hasta algún que otro youtuber -o, mejor dicho a estas alturas, tiktoker- no han querido perderse la gran noche de EH Bildu, la primera del futuro que les espera siendo, al menos durante los próximos cuatro años, lo que Arnaldo Otegi ha descrito como “la primera fuerza política” de Euskal Herria. Sin embargo, y aunque han empatado a escaños en el Parlamento Vasco, no han conseguido superar al PNV en votos. Pero eso ya lo pensarán mañana. Hoy toca celebrarlo.
La música, en general de grupos que hacen que parezca una herriko festa más que una noche electoral, solo deja de sonar cuando se conocen los primeros resultados de la noche. Cuando esto ocurre las cientos de personas que rodean la plaza del mercado, entre ellas caras conocidas de esta pasada legislatura como Oihana Etxebarrieta, Ikoitz Arrese, Rebeka Ubera o Maddalen Iriarte, miran atentas a los dos televisores instalados y esperan a que suene la voz del hasta ahora vicelehendakari y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka. Primero Álava, y se miran unos a otros hasta que Erkoreka pronuncia los tan esperados números. Van por delante. Suenan los aplausos, gritos y abrazos. Después, otra vez el silencio. Toca Bizkaia, plaza del PNV y lugar en el que han decidido ver -y celebrar- los resultados electorales desde EH Bildu, después de que las anteriores lo hicieran en Donostia. Como era de esperar, el PNV toma la delantera. Los aplausos menguan, pero vuelve la euforia al conocer Gipuzkoa, donde EH Bildu va a la cabeza. En la plaza del mercado hay saltos de alegría y hasta alguna lágrima de emoción. “Vox cero”, dice Erkoreka, y otra vez los gritos de euforia. En la sala contigua, donde se celebra el catering, el champán se está enfriando con cientos de copas, a la espera de ser abierto para la celebración.
La primera valoración ha corrido a cargo de Oihana Etxebarrieta, que ha destacado que la suya ha sido “una campaña ejemplar”. “Queremos destacar dos cuestiones: la primera, que hemos tenido las preocupaciones de los ciudadanos en el centro. Hemos hablado de Osakidetza, de vivienda y de la carestía de la vida. Y la segunda, que hemos mirado a los ojos directamente a los ciudadanos y hemos subido el nivel político del debate. Algo que es muy importante. Hemos visto a gente ilusionada yendo a votar a favor del cambio. La ciudadanía ha hablado. Escuchemos el mandato popular en qué dirección nos pide que vaya”, ha señalado la portavoz de campaña de EH Bildu.
Cuando Pello Otxandiano ha llegado al mercado cientos de cámaras se han abalanzado sobre él, que ha entrado acompañado de Arnaldo Otegi y Oskar Matute, entre otros. Una vez dentro, los líderes del partido han entrado en una de las salas, solos, para evaluar los resultados que iban saliendo. Hasta poco más de las 22.30 que han comenzado a salir a realizar declaraciones. El primero en salir ha sido Otxandiano, mientras cientos de personas se iban haciendo a un lado para que pasara, algunos dándole la mano, otros abrazándole. Seguido de él, Otegi. Después han subido los demás al escenario y han comenzado los gritos de “Independentzia” y decenas de banderas de Euskadi han ondeado sin parar.
Otegi, en su discurso en euskera, ha agradecido ser la “primera fuerza política y primera fuerza abertzale” gracias a los resultados “históricos” arrojados este domingo. “Somos la primera fuerza abertzale de Euskal Herria con mayor distancia que ayer... 400.000 votos en el conjunto de Euskal Herria. Quiero agradecer de corazón a las gentes de estos tres territorios que nos han dado su confianza. Los abertzales hacemos la contabilidad a nivel nacional. Para nosotros Euskal Herria no son tres territorios sino siete”, ha indicado frente a las caras emocionadas de sus compañeros de partido y militantes.
“Es verdad que el PNV ha ganado en votos y les felicitamos, pero lo nuestro es un sirimiri, con humildad y responsabilidad hemos conseguido algo que nadie hubiera imaginado hace cuatro años. El mapa político ya ha cambiado y ahora estamos en un nuevo tiempo”, ha señalado Otegi, para después presentar al candidato a lehendakari, entre gritos del público.
Otxandiano, también en euskera primero, ha reconocido que “antes había una diferencia de 10 escaños” con el PNV, “ahora cero”. “Hemos sido la primera fuerza en Álava, en Vitoria, y por primera vez en Eibar, Zumarraga y Urretxu. Estamos en una realidad política nueva. Tenemos una responsabilidad histórica y debemos dar un salto hacia nuestra soberanía”, ha indicado. También ha querido lanzar un mensaje a “los 50.000 votos que se han quedado fuera del Parlamento”, en referencia a los votantes de Elkarrekin Podemos Alianza Verde cuyos líderes no han logrado representación. “Asumimos y trabajaremos también para ellos. Hay que poner este país en marcha. El cambio está aquí y es imparable. Vamos en el buen camino”, ha concluido mientras el público gritaba “ari, ari, ari, Pello lehendakari”.
Una emoción desmedida que esta noche EH Bildu celebrará por todo lo alto, porque, aunque lejos de lograr una mayoría de votos o de liderar el próximo Gobierno vasco, han demostrado que la “falta de ansiedad política” de la que hablaba Otegi en campaña ha dado sus frutos y ha conseguido un sirimiri abertzale que será difícil de parar, al menos en los próximos cuatro años.