La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha considerado una “excelente noticia” que Mercedes-Benz proyecte una inversión de 1.230 millones en su planta de Vitoria. Unas inversiones que estarían condicionadas a que se firme el convenio colectivo de la planta y que se acepten unas condiciones de flexibilidad de la plantilla. La consejera, sin embargo, no ha considerado que este condicionante de la empresa sea una “contrapartida”. Sí ha destacado que la negociación del convenio, “en este caso y en cualquier otro”, es un aspecto relevante, “que garantizaría más el poder realizar las inversiones con seguridad en la negociación. Pero no creo que sea una contrapartida”, ha insistido, sino una intención por parte de la empresa de, “con el máximo nivel de transparencia”, trasladar a los trabajadores en “qué se está pensando a futuro”.
Tapia ha recalcado que Mercedes-Benz es una “planta competitiva”, en la que se puede “desarrollar un vehículo eléctrico de altísima gama, y no podemos dejar pasar esa oportunidad. Tenemos que trabajar todos, públicos y privados para que se haga realidad” a inversión, que, en cualquier caso dependerá de la decisión última de la dirección de la multinacional que puede optar por otra de sus ubicaciones.
La dirección de la planta de Mercedes-Benz en Vitoria presentó este plan de inversiones el pasado jueves al comité de empresa. Las partes llevan negociando 18 meses el nuevo convenio sin entenderse. Según trasladó el presidente del comité de empresa, Roberto Pastor, la inversión estaría destinada a preparar la planta -en la que en la actualidad se fabrican las furgonetas Clase V y Vito- para producir nuevos modelos. En todo caso, la ejecución de este plan de inversiones en Mercedes-Benz Vitoria depende de que el proyecto sea adjudicado por la multinacional alemana a esta planta, que a su vez está condicionado a que se consiga la firma del convenio para los próximos años y que se acepte más “flexibilidad” la adaptar la producción a la fabricación de nuevos modelos.
Si el proyecto finalmente no se adjudica a Vitoria, las inversiones en esta planta para los próximos años se quedarían en unos 230 millones de euros, y se limitarían al mantenimiento de las instalaciones para poder seguir fabricando los modelos que produce en la actualidad.
Tapia ha destacado a su llegada al Parlamento Vasco, donde este viernes hay pleno de control, que desde el Gobierno se lleva tiempo trabajando con Mercedes preparar la planta para el vehículo eléctrico, “hemos sido parte en la preparación del PERTE que se ha presentado recientemente y consideramos que es una gran oportunidad para Euskadi que Mercedes esté asentado aquí y considere esos 1.200 millones de inversión”. En este sentido, ha insistido en que como Gobierno y administración vamos a seguir como siempre colaboradores para que esto se haga realidad en el menor tiempo posible“.
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