Los tres concejales díscolos del PNV de Labastida crean un nuevo partido, Lasa Bai

Los tres concejales electos en listas del PNV en la localidad riojanoalavesa de Labastida y que no estuvieron de acuerdo con la decisión del partido de dejar gobernar a la lista más votada, la del PP, a pesar de tener las mismas opciones alternativas que en 2019, cuando se sustanció un pacto con EH Bildu, han consumado ya su salida de la formación nacionalista. Han creado una nueva plataforma Labastida Salinillas Bai (Lasa Bai), cuya líder es la portavoz de este grupo, Aintzane Prieto, que ha dejado su afiliación del PNV. En la Cadena Ser, el edil Alain Quintana ha admitido que han imitado el “a tomar por saco” de otros grupos vecinales de pueblos cercanos como Lapuebla de Labarca o Elciego con los partidos tradicionales: “La política fuera de los pueblos”.

El episodio de Labastida fue uno de los más controvertidos en Euskadi tras las elecciones municipales. El municipio se convirtió en el principal símbolo de la recuperación política del PP, que ha situado al joven Daniel García como regidor. Sin embargo, los números permitían un acuerdo entre PNV y EH Bildu para dirigir el Ayuntamiento, como cuatro años atrás. Pero los nacionalistas oficialmente argumentaron que la diferencia con los 'populares' era excesiva -se quedaron a menos de diez votos de la mayoría absoluta- y que tocaba hacer oposición. Además, pesó que el PNV ha necesitado de apoyos del PP en otros ámbitos como Durango o Gipuzkoa. La operación, sin embargo, hizo que dimitiera sin llegar a tomar posesión el fichaje para ser candidato en Labastida, el exdirectivo de EiTB Eduardo Barinaga, con casa en el pueblo.

La 'número dos' asumió la portavocía pero Prieto era la única de la lista -junto con una suplente- afiliada al partido. En buena medida, el PNV había absorbido la estructura de un colectivo independiente muy vinculado con el pueblo de Salinillas de Buradón, integrado en el municipio de Labastida. Finalmente, los tres ediles no quisieron desalojar al PP de la alcaldía pero sí fueron muy duros con las directrices del partido. Dijeron textualmente que les daba “asco” lo que había ocurrido y que se iban a desvincular del PNV, que de un plumazo se quedó sin representación en el pueblo a pesar de haber sido la segunda fuerza local. También criticaron que Barinaga les dejara tirados.

Ahora, esa desvinculación se ha traducido en Lasa Bai. El pleno quedará con cuatro escaños de nuevo para el PP de García, dos para EH Bildu y tres para la nueva formación. ¿Y cómo queda el PNV? El partido, según las fuentes consultadas, tenía medio centenar de afiliados antes de las elecciones. Ahora ha perdido una decena, pero retiene una estructura “sólida” de unos 40 militantes que le permitirán reorganizarse y presentar candidatura en 2027. La exalcaldesa hasta junio, Laura Pérez Borinaga, continúa siendo parlamentaria vasca.