El campo extremeño actuará la próxima semana en defensa del cultivo del tabaco ya que si no se incluye en el Plan Estratégico de España para la aplicación de la nueva Política Agraria Comunitaria (PAC), podría perder el 50 % de las ayudas, unos 14 millones de euros, y estaría en riesgo de desaparecer.
Como medida de presión, la próxima semana no se entregará tabaco a las industrias transformadoras, según han anunciado este viernes en una rueda de prensa Asaja Extremadura, UPA-UCE y Cooperativas Agroalimentarias de Extremadura.
Además, durante esos días se reunirán con sindicatos y alcaldes de la comarcas tabaqueras -Ambroz, La Vera y Campo Arañuelo- para concienciar al conjunto de la sociedad que es esencial que este cultivo mantenga el “status quo” actual en la futura PAC, ha indicado el presidente del grupo cooperativo, Ángel Pacheco.
El secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas, ha explicado que la Unión Europea quiere que en la nueva PAC se reduzcan las regiones agrícolas.
España tiene 52 y en el Plan Estratégico de España entrarán solo entre siete y once, según Huertas, que ha subrayado que si el tabaco no está entre ellas sería una “catástrofe social”.
En este sentido, ha recordado que Extremadura es la primera región tabaquera de Europa y la principal productora de España, ya que cultiva el 97 % del total, unas 29.000 toneladas.
5.400 familias
El negocio mueve en la zona norte de Cáceres más de 139 millones de euros, según Huertas, que ha subrayado que 1.400 familias viven directamente del tabaco y más de 4.000 de forma indirecta.
El secretario general de Asaja Extremadura, Ángel García Blanco, ha añadido que la primera transformación genera 800 empleos, el 54 % de ellos de mano de obra femenina, además de suponer el 18 % de las exportaciones, ser un cultivo medioambientalmente sostenible y fijar población.
Este sector emblemático para Extremadura está en riesgo, según han expuesto, ya que además los precios están por debajo del coste de producción y la UE prohíbe las ayudas acopladas en el caso del tabaco.
Además, los intervinientes han coincidido en que no hay alternativas a este cultivo que generen el mismo volumen de empleo.
Huertas ha señalado que el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que ya ha abordado el problema con el ministro del ramo, Luis Planas, debe abordar este asunto directamente al jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, como una “cuestión de estado”.
Los representantes de UPA-UCE y Asaja han coincidido que esto tiene una solución sencilla, voluntad política, como ha ocurrido otras ocasiones, y que el Gobierno decida su inclusión en el Plan Estratégico.
Pacheco ha comentado que aunque se pierde la producción en Europa, la gente seguirá fumando y el tabaco vendrá de otras partes del mundo
Debido a la pandemia de la covid-19 no han planteado movilizaciones tradicionales, pero no descartan salir a la calle si es necesario, y piden el apoyo de toda la sociedad extremeña, porque esta decisión repercute en el conjunto de la región.