La reducción de las frecuencias del autobús urbano en Badajoz durante este verano ha llevado a muchos usuarios a presentar quejas, según las asociaciones vecinales de la ciudad, trasladadas a estos colectivos, en el registro municipal o a la empresa concesionaria.
El presidente de la Asociación de Vecinos de la Barriada de Llera, Jesús Luengo, ha manifestado a EFE que este colectivo registrará una queja ante el Ayuntamiento para solicitar el regreso de todas las frecuencias, debido al “negativo impacto” que provoca en la actualidad en los vecinos del barrio.
En muchas ocasiones durante los últimos días, los usuarios de esta periférica barriada tienen que esperar de forma prolongada al autobús para que les acerque al centro, el cual realiza parada también en el centro de salud que le corresponde a la zona, el de Valdepasillas, al que acuden personas mayores o con movilidad reducida “en la actualidad muy afectados”.
Las personas con dificultades de movilidad que quieren ir al centro de salud de Valdepasillas “deben coger el autobús una hora antes” a su cita para realizar un trayecto en el que se tarda escaso tiempo en vehículo, ha lamentado. Según ha expresado Jesús Luengo, son muchas las quejas vecinales debido a esta reducción de las frecuencias.
El presidente de la Federación de Asociaciones Vecinales de Badajoz y Poblados “Siglo XXI”, Anselmo Solana, ha manifestado en este marco que son múltiples las reclamaciones realizadas por vecinos a través de distintos cauces ante esta decisión tomada.
Para Solana, es “vergonzoso” que se produzcan estos recortes en más de la mitad de las líneas pese “a las partidas económicas bastante importantes contempladas en los presupuestos” para este área y la concesionaria. Las reclamaciones se enmarcan en múltiples ámbitos, desde quienes deben estar en su puesto de trabajo a una determinada hora a aquellos que han de desplazarse a centros de salud o quieren tomar el transporte público para llegar a la piscina, espacios deportivos u otras dotaciones de ocio.
Entre estas reclamaciones se encuentra por ejemplo la queja de una vecina, a la que ha tenido acceso EFE, que tiene muchas dificultades para llegar a su centro de trabajo, como empleada pública, debido a los actuales horarios, y que en algunos días ha tenido incluso que recurrir ya a llamar a un taxi, como expresa el texto de la queja.
“No son conscientes del gran perjuicio que han ocasionado con esta decisión, deben replantearse acabar con estos recortes de frecuencias”, expresa al Ayuntamiento la ciudadana pacense.