Que los aviones inicien ruta en Badajoz en vez de en Madrid o Barcelona, cambiar los horarios, o instalar un sistema de ayudas al aterrizaje (ILS) de nivel superior, son las tres posibilidades que se barajan para hacer frente a los problemas que las nieblas están causando al aeropuerto de Badajoz y han cancelado este otoño-invierno 40 vuelos.
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible abordaba este martes con los demás integrantes institucionales y sociales del Comité de Coordinación Aeroportuaria de Extremadura posibles soluciones.
En el encuentro, celebrado en el mismo aeropuerto, el Ministerio ha estado representado por la subdirectora general de Transporte Aéreo, Verónica Elvira; y por el jefe de Área de Estrategia Aeroportuaria de la Dirección General de Aviación Civil, Angel Galán.
En la reunión se han analizado las diferentes opciones que podrían tomarse para minimizar el impacto de estos episodios en el futuro, según ha informado Transportes en un comunicado.
Los asistentes se han emplazado a futuros encuentros para estudiar en detalle las alternativas para la futura toma de decisión.
Entre las soluciones que se han barajado se encuentran entre otras la mejora de las prestaciones del sistema de Instrumental Landing System (ILS) del aeropuerto, modificar los horarios de operación o valorar la posibilidad de que las aeronaves pernocten en el aeropuerto.
El aeródromo pacense dispone de un sistema de ayuda a la navegación ILS categoría I, que permite a las aeronaves aterrizar con seguridad en condiciones de baja visibilidad.
Este sistema facilita operar con una visibilidad mínima vertical de 200 pies (61 metros) y un alcance visual de 800 metros, pero a veces los comandantes no disponen de esos 61 metros.
Para operar con un ILS tanto las aeronaves como las tripulaciones tienen que estar habilitadas para hacerlo, y la última decisión siempre es del comandante del avión.
El comité, que reúne a representantes ministeriales y de la Junta de Extremadura, la Delegación del Gobierno, de entidades locales, de organizaciones económicas y sociales y de Aena, pretende “aunar posturas y compartir los desafíos de unas infraestructuras clave para el territorio”.
6,3% más de pasajeros que antes del covid
Han analizado la situación del aeropuerto y ha constatado la recuperación del tráfico tras la pandemia de covid.
La instalación registró en 2023 un total de 80.181 pasajeros, un 6,3 por ciento más que en 2019, el último año antes de la pandemia, y un 21,8 % más que en 2022.
En cuanto al movimiento de aeronaves, contabilizó 3.119 aterrizajes y despegues en 2023, un 8,3 por ciento más que en 2019 y un incremento del 14,9 % con respecto a 2022.