El Consejo de Gobierno de Extremadura ha aprobado una nueva línea de incentivos regionales a la inversión empresarial, dotada con un crédito inicial de 40 millones de euros y dirigida tanto a la creación de nuevos proyectos empresariales como a la transformación y consolidación de los ya existentes, que priorizará las iniciativas que se desarrollen en municipios de menos de 3.000 habitantes.
De esta forma, el Ejecutivo regional apuesta por la pequeña y mediana empresa de Extremadura donde “no todos son grandes proyectos” en el objetivo de contribuir al desarrollo industrial y a la creación y mantenimiento de empleo al tiempo que se fija población en el territorio, ha expuesto el Consejero de Economía, Ciencia y Agenda Digital, Rafael España.
Como novedad, esta convocatoria de ayudas, financiada al 85 por ciento con cargo a los fondos FEDER, establece para determinados supuestos un procedimiento de gestión “express” que consiste en realizar en un único trámite la solicitud de la subvención y, en caso de concederse, la tramitación de su cobro. De esta forma, al concederse la ayuda se tramita también su pago sin necesidad de que el interesado tenga que solicitarlo, ha explicado España.
En concreto, la convocatoria está destinada a empresas que realicen inversiones en activos fijos y contribuyan al desarrollo industrial, mejora de la competitividad, transformación digital e impulso de la innovación productiva en los ámbitos de la especialización inteligente.
Así, tendrán la consideración de beneficiarias las empresas, y en especial, las pymes, que proyecten llevar a cabo una inversión en un centro de trabajo o establecimiento operativo en la región en determinados sectores de actividad considerados como subvencionables, por lo que no podrán portar a la ayudas los proyectos que ya hayan comenzado.
Ayuda por los costes financieros
Por otra parte, como medida de choque ante la subida de los tipos de interés, se concederá una ayuda complementaria para reducir los costes financieros de las empresas que soliciten préstamos a cualquier entidad financiera o avales de una sociedad de garantía recíproca para desarrollar sus proyectos.
Asimismo, se concederá más puntuación a los proyectos presentados en localidades con menor número de habitantes y se incrementará la intensidad máxima de las ayudas en todos los tipos de empresas, hasta un 50% en las pequeñas empresas, un 40% en las medianas y un 30% en las grandes.
El decreto aprobado establece tres modalidades de ayudas, la de “subvención por actividad”, para la que se tendrá en cuenta el sector en el que va a operar; y la de “subvención por relevo generacional”, que incentiva la continuación de un establecimiento que hubiese cerrado por motivos como jubilación, incapacidad permanente o fallecimiento de su titular.
La tercera modalidad es la de “subvención para el fomento de la digitalización empresarial o impulso de la empresa 4.0”, dirigida a proyectos que promuevan su transformación digital y conlleven la introducción efectiva en sus sistemas de tecnologías digitales y de comunicaciones.
La cuantía se determinará aplicando los criterios de valoración previstos para cada modalidad de subvención y el importe mínimo de inversión subvencionable será de 25.000 euros y el máximo de 1,2 millones de euros, de manera que el beneficiario deberá realizar una aportación mínima del 25 por ciento de los costes subvencionables.
Según datos aportados por el consejero, la anterior convocatoria de esta línea de incentivos recogió un total de 2.377 solicitudes que suponían unos 525 millones de euros, de los que finalmente se concedieron 86.
El plazo de solicitud de la nueva convocatoria permanecerá abierto desde su publicación en el Diario Oficial de Extremadura (DOE), “en los próximos días”, hasta el 31 de diciembre de 2026, ha indicado España.