El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se ha comprometido a que en los primeros meses de 2019 estarán acabadas la mayoría de las obras en la nueva plataforma ferroviaria de alta velocidad, lo que permitiría circular entre Badajoz y Madrid en un tren rápido diésel, y un año después estaría electrificado con lo que podría aumentarse la velocidad.
Sin embargo no ha querido concretar por razones de “prudencia”, pese a la insistencia de los periodistas, qué mejoras en tiempos de viaje significarán esos trabajos, y si al final Extremadura tendrá una línea de alta velocidad (LAV) con las mismas características que hay en otras comunidades (doble vía electrificada y en ancho europeo); actualmente el trayecto entre Badajoz y Madrid dura casi seis horas.
El ministro ha visitado este jueves junto al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, las obras del viaducto ferroviario del Almonte y luego se ha reunido en Garrovillas durante una hora con él, con los integrantes del Pacto Social y Político por el Ferrocarril en Extremadura (partidos políticos, sindicatos y empresarios), y los presidentes de las diputaciones de Badajoz y Cáceres.
Además de prometer para “los primeros meses de 2019” la circulación de un tren rápido diésel, algo que ya anunció y no cumplió la anterior ministra Ana Pastor, De la Serna ha anunciado, esto sí es novedad, la electrificación de toda la línea para un año después, y además un estudio del trazado Mérida-Puertollano para poder eliminar las actuales limitaciones de velocidad y mejorar su seguridad, a fin de que puedan circular trenes de mercancías procedentes del puerto portugués de Sines, pero sin electrificar.
Vara: “Qué hemos hecho para merecer esto”
El presidente de la Junta, Fernández Vara, ha dicho que lo anunciado por el ministro no da respuesta a todas la reclamaciones del Pacto pero al menos hay algunos compromisos con fechas “que espero se cumplan”; no se moderniza a fondo y electrifica Mérida-Puertollano, ni se mejoran la comunicación con Sevilla ni el ferrocarril convencional (no de alta velocidad) interior y que comunica las ciudades de Extremadura, reclamaciones todas ellas incluidas en el Pacto regional.
Por tanto “vamos a seguir luchando por ello y esto no se acaba en 2019”.
Vara ha señalado que España tiene una deuda con Extremadura, que es el ferrocarril, y que no quedará saldada hasta tener un servicio “decente”, pero mientras tanto se ve obligada a competir con comunidades que usan trenes del siglo XXI “mientras nosotros estamos en el XIX; una batalla desigual como si en una pista deportiva ellos corrieran con zapatillas último modelo y nosotros con alpargatas”.
En su opinión no hay ninguna razón para que pasen los años todo siga igual, y nadie explique “qué hemos hecho para merecer esto, que unos tarden dos horas y media entre Madrid y Barcelona, seiscientos kilómetros, y nosotros seis horas en los cuatrocientos de Badajoz-Madrid”.
Tras lo prometido por el ministro De la Serna, Vara ha dicho que la deuda con Extremadura “sigue sin saldarse”, aunque habrá un seguimiento para que al menos esos mínimos compromisos se cumplan.
Monago
Para el presidente regional del PP, José Antonio Monago, “el tren del siglo veintiuno cada vez está más cerca pero entiendo que la sociedad extremeña no se lo acaba de creer y lo hará cuando pueda comprar el billete y montarse”.
“Es una promesa que se sigue retrasando en el tiempo”
Julián Carretero, secretario regional de CCOO, queda “totalmente insatisfecho” y plantea que nadie se puede creer que en 2019, en vísperas de las elecciones autonómicas y con Vara gobernando, el Gobierno central del PP vaya a propiciar que circule el tren rápido diésel. En todo caso “un trenecito entre Badajoz y Plasencia”.
Como máximo en 2020 habría “una vía simple electrificada y en ancho ibérico, no AVE, es decir de la línea de alta velocidad nada de nada, ni está ni se le espera, esto es lo mismo que prometió Pastor”. Por ello “vamos a seguir peleando”.
“Podemos decir que ya no tenemos AVE que nos comunique con Madrid y resto de Europa”, ha sido también duro en su conclusión Javier Peinado, de la Confederación Regional Empresarial. La única satisfacción es que la movilización “ha conseguido que se empiece a hablar de electrificación”.
Para Álvaro Jaén, de Podemos, la visita del ministro ha sido “humo, y con el pacto presupuestario que se anuncia PP-PSOE vendrá un AVE que ni pedimos, ni necesitamos”.
Victoria Domínguez, de Ciudadanos, ha reclamado que el AVE no es la panacea de todo y también se necesita un ferrocarril interior en una región tan grande para que “una mujer de Baños de Montemayor pueda ir y venir en el día al médico a Badajoz”.
“Extremadura ya no se lo cree”
Tras la llegada, visita y marcha del ministro De la Serna “no hay ninguna novedad”, y las promesas hechas “Extremadura ya no se las cree”, opina el portavoz parlamentario de PSOE-SIEx Valentín García.
“Decepcionante, incongruente”, ha valorado Patrocinio Sánchez, secretaria regional de UGT. “No tendremos en Extremadura un tren digno ni en 2020, y a este paso no sé si alguno lo llegaremos a ver”.
Próxima protesta en Cáceres
Sindicatos y empresarios piensan ya en la siguiente movilización por un ferrocarril moderno, que estaba esperando a los resultados de la visita del ministro de Fomento.
El lugar elegido es la ciudad de Cáceres –el 22 de noviembre hubo en Badajoz la primera manifestación, 4.000 personas-, entre los Carnavales y Semana Santa, y con un formato que pueda atraer también a los jóvenes, que no respondieron a la cita de Badajoz.