La firma del convenio colectivo en el sector del campo está cada vez más lejos. CCOO de Extremadura ha denunciado este miércoles que las organizaciones empresariales agrarias pretenden hacer imposible el acuerdo al llevar a la mesa de negociación propuestas “retrógradas, que supondrían recortes en los ya limitados derechos de los trabajadores y trabajadoras del sector”.
Después de meses de retraso en la negociación, las patronales han presentado una serie de medidas de que generan “dudas sobre su verdadera voluntad de que haya un nuevo convenio, porque saben que estas propuestas son inaceptables”, insiste el sindicato.
Por ello, CCOO de Industria ha pedido a las organizaciones empresariales agrarias a que “terminen ya” con el doble discurso: por un lado, hablando públicamente de modernizar el contenido del convenio, y, por otro, poniendo sobre la mesa de negociación recortes que devuelven las relaciones laborales a siglos pasados.
En concreto, la organización sindical ha explicado que, junto con estas “pretensiones de limitar derechos”, la patronal se niega a hablar de incrementos salariales en un sector con salarios muy bajos. “Los empresarios se mantienen a la espera de si el Gobierno decide o no subir el salario mínimo interprofesional para adaptar el convenio a esa exigencia legal y se oponen a aceptar la propuesta sindical de subir un 1,5 por ciento para las cuatro categorías profesionales que estos años no han tenido ningún aumento, al estar por encima del SMI”, ha indicado.
Entre las propuestas de bloqueo de la patronal está el elevar la jornada laboral anual de las 1.768 horas anuales a las 1.824 horas, el máximo permitido por el Estatuto de los Trabajadores. A juicio de CCOO, se trata de una ampliación “inasumible por la dureza y penosidad del trabajo en el campo, que demuestra la poca sensibilidad que el empresariado tiene hacia la salud y las condiciones de trabajo de los jornaleros”.
De hecho, los empresarios también han propuesto, según el sindicato, la eliminación del convenio de la obligación de que del 15 de mayo al 15 de septiembre sea jornada continuada, “algo que es más que lógico en una región como la extremeña, en la que el elevado calor en verano hace imposible el trabajo en el campo a partir de ciertas horas”, ha recordado.
El objetivo de as organizaciones agrarias es dejar esta decisión de si la jornada es continua o no a la discrecionalidad de las empresas, “introduciendo así una desregulación y arbitrariedad que es evidente que solo podría generar abusos y riesgo para la salud de los trabajadores”.
La patronal también quiere que los permisos retribuidos se puedan colocar en días naturales, “cuando tienen que estar obligatoriamente en días laborales para poder ser realmente efectivos y considerarse como tales”, ha insistido CCOO.
Ante estas propuestas planteadas desde las organizaciones empresariales, CCOO ha subrayado la importancia de que se llegue a un acuerdo en la negociación del convenio del campo porque es un sector estratégico para la región tanto en lo económico como en lo social.
La próxima reunión prevista de negociación del convenio del campo está prevista para el 14 de julio.