Un grupo de trabajadores de Ambuvital Cáceres, la empresa concesionaria del transporte sanitario, se han concentrado este martes en Mérida para exigir el desbloqueo del convenio colectivo, que está “condenando” a una plantilla de 1.200 personas a salarios “de 950 euros”.
La concentración se ha desarrollado de forma paralela a la comparecencia en la Asamblea de Extremadura del presidente del Comité de Empresa de Ambuvital de la provincia de Cáceres, Rafael Garzo, para abordar este asunto, a propuesta de Unidas por Extremadura.
En declaraciones a los periodistas el secretario del comité, Manuel Mandado, ha señalado que la renovación del convenio está pendiente desde el año 2017 y no pueden estar más tiempo así.
Además, con la entrada en vigor de las 1.800 horas regularizadas las condiciones han mermado y “de milagro” los trabajadores llegan a las 1.100 euros de sueldo con la antigüedad.
El sindicalista ha recordado que llevan 730 días de huelga indefinida y ha anunciado que proseguirán con ella hasta que no haya soluciones.
Mandado ha señalado que en anterior Gobierno regional no les atendió y que este ha mostrado “voluntad política”, pero ha insistido en que quieren “hechos” ya que a última hora el Servicio Extremeño de Salud (SES) les desconvocó a una reunión prevista para abordar los pliegos de condiciones.
No obstante, la reunión se llevó a cabo sin ellos, ha advertido el sindicalista, que ha recordado que sí participaron anteriormente en una para tratar también de los pliegos de condiciones.
En este sentido, en el comunicado de la convocatoria de la concentración de este martes, los representantes de los trabajadores mostraron sus temores a que la desconvocatoria de la reunión estuviera relacionada con la comparecencia de hoy en la Asamblea.
“Lamentamos profundamente que por parte del SES se hayan visto estas reivindicaciones legítimas de los trabajadores como un ataque personal, por lo que pedimos más responsabilidad a este organismo, que es quien tiene que velar porque todos los extremeños y extremeñas reciban un transporte sanitario de calidad y que todos los trabajadores que forman este sector tengan unas condiciones de trabajo dignas”, ha señalado el Comité de Empresa.
A su juicio la situación que se ha producido podría ser “un claro chantaje desde la Administración”, por lo que esperan que “se retome la vía del diálogo social sin ningún tipo contrapartida”.