El sábado 4 de julio es la fecha que se ha marcado Guillermo Fernández Vara para tomar posesión como nuevo presidente de la Junta de Extremadura. Según los plazos propuestos ayer por el Partido Socialista, la primera sesión de investidura sería dentro de una semana, 29 y 30 de junio, la probable segunda y definitiva el jueves 2, y el sábdo sería la toma de posesión en el patio porticado del Parlamento regional.
Es el calendario que maneja el PSOE y que en cuanto a las primeras fechas, el primer pleno de investidura, adelantó ayer como propuesta el portavoz del grupo parlamentario socialista, Valentín García.
“Queremos formar gobierno cuanto antes para que se puedan empezar a resolver los problemas de los ciudadanos, vamos a intentar hablar con los otros grupos parlamentarios para reducir el número de cinco días que hay para la constitución de los grupos, puesto que ya todos sabemos quiénes son las direcciones de cada uno”.
Para ello es preciso en primer lugar que el plazo para la constitución de los grupos parlamentarios, que es de 5 días a partir de ayer, se pueda acortar a tres si así lo tiene a bien la Mesa de la Asamblea de Extremadura, de modo que lo pudieran hacer pasado mañana viernes.
Si Fernández Vara no obtuviera mayoría absoluta, 33 votos, en la sesión pretendida de los días 29 y 30, se produciría otra votación transcurridas 48 horas en la que saldría elegido por mayoría simple, es decir, que le bastaría con los votos del Grupo Parlamentario Socialista-Siex.
Constitución del Parlamento
La IX Legislatura de la Asamblea de Extremadura arrancó ayer con la elección de la socialista Blanca Martín como presidenta, que ha contado con el apoyo de los 30 votos del PSOE más el de la diputada de Ciudadanos, María Victoria Domínguez, que también ha respaldado a los candidatos socialistas a la vicepresidencia y secretaría primera. Domínguez ha explicado que tomó la decisión de respaldar a Blanca Martín hace muchos días, ya que conoce su capacidad de trabajo y de diálogo “más que de sobra”, además de que “es paisana mía”, ambas son de Plasencia.
La Mesa de la Asamblea ha quedado formada definitivamente por el PSOE y el PP, con dos miembros cada uno, y por Podemos, que logra entrar gracias a la renuncia de los socialistas a uno de los puestos que les correspondía por los resultados de las elecciones autonómicas.
Los socialistas Blanca Martín y José Andrés Mendo ocuparán la presidencia y la vicepresidencia primera, respectivamente; mientras que el popular Fernando Manzano ocupará la vicepresidencia segunda; Eugenio Romero, de Podemos, la secretaría primera, y Francisca Rosa (PP) la secretaría segunda. Ciudadanos no estará representado.
La candidatura de Blanca Martín, única que se ha presentado, ha necesitado de una segunda votación para su elección, ya que en la primera los 30 votos socialistas y el de Ciudadanos, no alcanzaron la mayoría absoluta necesaria de 33, puesto que PP y Podemos han votado en blanco.
En segunda votación finalmente, Martín se ha convertido 20 años después en la segunda presidenta del legislativo extremeño tras Teresa Rejas (IU), que lo fue durante dos años de la cuarta legislatura, y se une, al frente de la Cámara a Pablo Castellano (PSOE), que fue presidente en la legislatura constituyente; Antonio Vázquez (PSOE), que lo fue en la primera, segunda y tercera; Manuel Veiga (PSOE), parte de la cuarta y la quinta; Federico Suárez (PSOE), en la sexta; Juan Ramón Ferreira (PSOE), en la séptima, y Fernando Manzano (PP), en la octava.
La nueva presidenta, por la igualdad
En su discurso, Blanca Martín ha asegurado que uno de los mayores retos que se propone y propone a los diputados, es trabajar en pro de la igualdad “en todas sus vertientes” y acabar con la lacra de la violencia machista “desde la condena sí, pero también desde el poder de la norma”.
Blanca Martín ha recordado que aunque no es la primera presidenta de la Cámara, la de la IX Legislatura es la más femenina de su historia, con 31 escaños ocupados por mujeres, por lo que se ha mostrado convencida de que se logrará que sea la legislatura de la igualdad. Por este motivo, espera que ya no sea una noticia extraordinaria un hecho de este tipo, “porque solo la normalidad nos hará más iguales a hombres y mujeres”.
Además, ha indicado que esta legislatura será la de las personas, ya que se abrirá la Asamblea “de par en par a ellas” y ha mostrado su deseo de convertir la Asamblea “en una casa de verdad” en la que se busquen soluciones a problemas como el desempleo, los desahucios o la pobreza.
Por ello, ha pedido a los diputados trabajar para construir cada días “un monumento al diálogo y a la palabra” y ha tenido una mención especial para las personas que trabajan en el campo extremeño, “que saben muy bien trabajar muy duro” y para que se les tenga presentes “como ejemplo a seguir de trabajo incansable”.
Cada vez más libertad en la asunción del cargo
Por el rey, por justicia social, por “dos mujeres indefensas”... son algunos de los mensajes que lanzaron ayer algunos de los diputados autonómicos en la jura o promesa de sus cargos, un acto en el que un libro, “Extremadura saqueada”, se ha codeado unos segundos con el Estatuto y la Constitución, según recoge Efe.
La sesión de investidura de la IX Legislatura de la Asamblea de Extremadura se ha convertido así en la más reivindicativa de la historia y ha seguido el guión de lo ocurrido en estos nuevos tiempos políticos en las toma de posesiones de alcaldes y concejales en Extremadura y en otros puntos de España.
Si en Cataluña los ediles soberanistas hicieron sus promesas por “imperativo legal”, en Extremadura han sido otros los mensajes proferidos por una decena de diputados de Podemos y del PP.
Los socialistas y la única parlamentaria de Ciudadanos, María Victoria Domínguez, se han atenido a la fórmula tradicional: acatar el Estatuto de Autonomía y la Constitución Española y cumplir fielmente con las obligaciones del cargo.
La que primero se ha arrancado con originalidad ha sido Jara Romero, de Podemos, secretaria primera de la Mesa de Edad de la Asamblea por su condición de más joven (26 años).
Ha aclarado que no están aquí “para amar en silencio” sus ideas de justicia sino “para llevarlas a todas partes”.
Por esta senda han caminado otros compañeros, como Daniel Hierro y el líder, Álvaro Jaén, que como ocurrió en el Ayuntamiento de Mérida con uno de sus concejales, ha defendido la reforma del artículo 135 de la Constitución por “vulnerar los derechos humanos”.
El artículo fue reformado en 2011 por acuerdo de PP y PSOE para limitar el déficit.
Hierro ha abogado por trabajar para poner a las personas por delante de los “beneficios privados” y su compañero Eugenio Romero, elegido secretario primero de la mesa, ha defendido la lucha contra las “desigualdades entre ricos y pobres”.
Con el libro ‘Extremadura saqueada’
Romero ha prometido el cargo con la mano sobre la Constitución, el Estatuto y...el libro “Extremadura saqueada”, de varios autores, todo un simbolismo.
En medio de las reivindicaciones de Podemos se han colocado varios parlamentarios del PP, como Gema Cortés o Luis Francisco Sánchez, que también han expresado su lealtad al rey, o la consejera en funciones de Educación y Cultura, Trinidad Nogales, que ha jurado cumplir “honradamente” sus obligaciones.
El mensaje quizá más llamativo ha sido el del secretario provincial del PP de Badajoz, Juan Antonio Morales, al haber asegurado que hay “persecución política” del alcalde de Villanueva del Fresno a “dos mujeres indefensas”.