El Gobierno extremeño ha mostrado su “respeto absoluto” a la intención del Ayuntamiento de Sevilla de cerrar la Plaza de España de la ciudad para cobrar entradas a los visitantes de fuera de la provincia y ha afirmado que, “en estos momentos”, no se contempla una medida similar en la región.
“No descarto que en un futuro, si es necesario, se hiciera”, pero “en este momento no tenemos ninguna intención de llegar a un procedimiento semejante”, ha afirmado la consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes, Victoria Bazaga, a preguntas de los medios.
No obstante, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, la también portavoz del Ejecutivo ha expresado el “respeto absoluto” a la decisión del alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, y las razones que le hayan llevado a ella.
Según la propuesta del Gobierno municipal sevillano, con la recaudación obtenida con la venta de entradas se podría mantener un servicio de vigilancia durante 24 horas y contar con un taller de restauración.