Estamos en un tiempo histórico para poder transformar la sociedad actual y no debemos permitirnos dejar escapar esta ocasión ya que la vida de infinidad de familias que están padeciendo a diario una situación de angustia y sufrimiento, al no disponer de empleo o de ningún tipo de ayuda, requieren de nuestro compromiso, además estos periodos de cambio se presentan cada mucho tiempo.
Si nos remitimos al pasado más reciente, encontramos al menos una etapa en las que las condiciones se asemejaban a las que sufrimos en la actualidad, fue del transcurso de la dictadura de Primo de Rivera al inicio de la Segunda República. Este antecedente histórico supuso la creación de un frente popular de izquierdas y su posterior éxito electoral y por ende la consecución de los mayores avances en cuanto a derechos políticos, sociales y laborales de la historia contemporánea española, pues bien, ahora nos corresponde impulsar los frentes populares del siglo XXI.
Las condiciones objetivas y subjetivas, salvando las distancias para los más nostálgicos, se asemejan a las que vivimos en la actualidad. En ambos periodos se venía de un desprestigio de la gestión política y del descrédito de su máximo responsable, agudizada con legislación que endurecía y criminalizaba la protesta unido al corporativismo del propio gobierno mediante una defensa a ultranza de los suyos aún sabiendo de que sus conductas eran ilícitas.
En Cáceres, numerosas cacereñas y cacereños se han unido para acabar con este periodo de oscurantismo, corrupción y despropósitos de nuestros gobernantes y han creado el Frente Popular que llevará la esperanza a la población de que hay una alternativa, ese frente ciudadano se denomina en la actualidad Ganemos Cáceres, un espacio donde las luchas por la dignidad, el empleo, contra los desahucios, por la renta básica, el ecologismo, la defensa de los animales, el ocio, la cultura, el deporte pueden tener voz y donde las propuestas de todos los ciudadanos son recogidas. En 1936 el Frente Popular consiguió ganar las elecciones, en 2015 el Frente Popular del Siglo XXI concurrirá también a las comicios en Cáceres y acabara con el bipartidismo.
Como ejes prioritarios se encuentran recuperar la prácticas democráticas de las instituciones que han sido secuestradas en los últimos años, decisiones unilaterales, falta de transparencia, son las señas de identidad del equipo de gobierno de nuestra ciudad, como alternativa ilusionante se apuesta por un ayuntamiento abierto a los cacereños, facilitando la participación de los vecinos para mejorar sus barrios. Anteponer el uso de los fondos públicos para aquellos servicios de primera necesidad y no despilfarrándolos en parkings, aeródromos u otras de las tantas malas decisiones de la Alcaldesa del Partido Popular en Cáceres. Evitar por tanto que la unión del PP y del PSOE, el famoso bipartidismo, pueda seguir privatizando en Cáceres servicios esenciales como ya hizo con el autobús y el agua.
Todo, como en esta vida, es cuestión de predisposición y en Cáceres se ha demostrado que es posible converger y confluir para construir una alternativa real ciudadana a las élites políticas. Gente de muy diversa procedencia y con ámbitos de actuación muy variados han conseguido sentarse y trabajar por un Cáceres de los cacereños y para los cacereños. Sin protagonismos ni intereses particulares, simplemente el compromiso de trabajar por un proyecto ,que es abierto y plural desde sus inicios y cuya estructura seguirá siendo abierta y participativa. Quien no entienda que debemos aprovechar este momento y corresponde la necesidad de caminar juntos en la misma dirección, será porque tendrá otros intereses distintos a los del común del pueblo y buscarán sillones, prebendas o simplemente su minuto de gloria.
En Cáceres ya tenemos el frente popular del Siglo XXI, se llama Ganemos Cáceres y está destinado a transformar el concepto de política. Si triunfa Ganemos Cáceres, ganamos todos los habitantes de nuestra ciudad.
José Luis Gibello Osuna ES abogado y activista en movimientos sociales de Cáceres, así como integrante de Ganemos Cáceres.