Tiene en contra al mundo de la cultura clásica, los movimientos sociales y los partidos de la oposición en bloque, y es consciente de ello. Con una papeleta así Monago compareció este lunes ante la prensa.
Tenía que aclarar si buscaba otro sitio para montar el partido de pádel o lo mantenía en el Anfiteatro romano. Quienes pensaban que el presidente extremeño iba a rectificar, se equivocaban. Monago ha optado por la segunda opción, la de seguir adelante, ante la perplejidad de muchos.
Las críticas le han llovido a Monago desde todos los rincones, incluso han traspasado las fronteras nacionales. Pero el presidente de la Junta simplemente ve intereses ‘electoralistas’ entre quienes le han reprochado su actitud.
Monago se apoya en el Consorcio Ciudad Monumental, ente público encargado de velar por el patrimonio monumental. Insiste en que si hay algún reparo por parte del Consorcio de la Ciudad, que por ahora no se ha producido, no tendría lugar el evento. Al mismo tiempo transmitió que el patrimonio no debe estar “en una urna de cristal”.
Y de camino, aprovechando que estamos en precampaña, ha recriminado a quienes le critican que “se ve que hay un cierto mar de fondo que se alimenta más por la posibilidad de unas elecciones que por otras razones”.
No obstante, y pese a sus palabras, más de 32.000 personas ya han firmado en Internet en varias iniciativas ciudadanas en contra de esta medida, a través del portal Change.org.
La polémica ha sido el centro de atención en todas las conversaciones de los emeritenses, siempre celosos con su patrimonio y conscientes de su valor.
Los mismos ciudadanos que pueden llegar a ver paralizadas las obras de su casa semanas, incluso meses, en caso de que en su patio aparezca algún vestigio arqueológico del pasado, ahora se preguntan cómo puede ser tan fácil montar un macro evento así dentro del Anfiteatro, un majestuoso marco que ha aguantado el paso de los siglos, que goza del máximo nivel de protección y sobre el que se repitieron siglos atrás peleas de gladiadores y recreaciones de toda clase.
Las voces críticas
Han sido muchas las voces científicas las que se han mostrado contrarias a montar el torneo dentro del Anfiteatro, entre ellos el exvicepresidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Patrimonio de la Humanidad (ICOMOS), Antonio Campesino. A su juicio hay que aplicar simplemente el sentido común para llegar a la conclusión de que un macro evento deportivo así no cabe en el monumento.
Según ha lamentado, confiaba en que hubiera algún tipo de 'matiz' contrario al evento desde el Consorcio Ciudad Monumental de Mérida. Se pregunta igualmente dónde está la opinión de la Dirección General de Patrimonio, y quién asumirá la responsabilidad en caso de que un monumento milenario sufriera daños.
La voz de este experto se suma a la de la Asociación Hispania Nostra, que piensa que el torneo en el monumento es un 'disparate' que hay que parar por el bien del patrimonio de la humanidad, y advierte de los riesgos a los que se enfrentan las ruinas romanas.
Comparte esta idea Pedro Mateos, antiguo director del Consorcio y miembro del Instituto de Arqueología de Mérida, un órgano que pertenece al CSIC y la Junta, que también advirtió a este medio que el espacio del Anfiteatro romano, a diferencia del teatro, no está consolidado.
Comparecencia de la consejera
En mitad de la la tempestad Monago ha encontrado un apoyo, no exento de polémica. El diputado y portavoz del partido regionalista PREX-CREX, Damián Beneyto, señalaba que si el torneo deportivo respeta el monumento sería una buena idea. “La plaza de toros de Nimes es un coliseo romano y su conservación no se ha visto comprometida”. Algo que en Twitter desmentía la otra diputada del PREX-CREX, Fernanda Ávila, afirmando que ella misma había firmado en contra del torneo, y que su partido también se opone.
Frente a esta polémica, el PSOE ha presentado en el Parlamento extremeño una petición urgente de comparecencia de la consejera de Cultura, Trinidad Nogales, para explicar con qué criterios se ha autorizado la celebración del World Pádel Tour en el anfiteatro.
El PSOE quiere que Nogales explique de manera “clara y rotunda” bajo qué circunstancias y cuáles son los motivos y criterios técnicos por los que el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida aprueba el evento, y si comparte la opinión de este ente público. Mientras, el grupo municipal socialista en el ayuntamiento solicitará el acta de la reunión del Consorcio donde se tomó esa decisión, así como el informe técnico que la avala.
El diputado socialista y candidato a la alcaldía de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, advierte que este evento, y los daños sobre el monumento, podrían inducir a la propia UNESCO a tomar una decisión, y en peligro así la declaración de Patrimonio de la Humanidad al Conjunto Arqueológico de Mérida.
IU también llevará una pregunta similar al pleno de la Asamblea, al mismo tiempo que la asamblea local de Izquierda Unida Mérida ya ha iniciado contactos con diferentes colectivos de la ciudad con el propósito de realizar una convocatoria unitaria en defensa de la protección del patrimonio.
A su juicio, la iniciativa del gobierno de Monago supone una agresión al patrimonio arqueológico carente de toda justificación.
Otra de las formaciones críticas ha sido Equo, que denuncia que se quiera poner en peligro el patrimonio histórico como este. “Estos gobernantes son como Atila y los Hunos: no dejan piedra sobre piedra. Con las elecciones autonómicas y municipales a la vuelta de la esquina, tenemos una oportunidad de demostrar que no estamos de acuerdo con sus actuaciones”, añade.