A cinco meses escasos de las elecciones autonómicas, eldiario.es Extremadura entrevista al candidato del PSOE y secretario regional del partido, Guillermo Fernández Vara. Lo hacemos al filo de terminar un año en el que, aunque sabedor de que no tenía mayoría para ganarla, presentó moción de censura contra el presidente de la Junta, José Antonio Monago, y a partir de ahí a este último parece que todo le sale mal.
De la conversación extraemos en primer lugar el análisis que hace sobre la situación económica y social de la región, y en una segunda parte que publicaremos mañana los lectores conocerán sus pronunciamientos políticos y electorales, con cuestiones como el papel de Podemos, las relaciones con IU, o su forma de hacer oposición.
¿Estamos mejor o peor que en 2011, cuando perdió usted las elecciones?
A finales de 2010 la Comunidad tenía un PIB anual de 18.026 millones de euro, y ahora, con datos que acaban de salir, estamos en 17.023. Extremadura vale menos que lo que valía hace cuatro años, aún añadiendo en la valoración varias actividades sumergidas. Los datos son los que son, al inicio de legislatura se dudaba de la EPA porque no le interesaba a Monago, ahora es el catecismo. Los recortes llegaron para sanear las cifras, ahora llegamos al final de trayecto con tanto sacrificio a las espaldas, y no solo no se ha saneado la economía regional sino que la Junta tiene 3.200 millones de euros de deuda, se ha acumulado más deuda que en los cuatro años anteriores; ¿qué nos han contado durante este tiempo?, el gran argumento era sanear los números, y al final después de tanto recorte, nada.
¿Cómo ve la situación económica y social?
No está bien, otra cosa distinta es que nos queramos engañar, la realidad de los extremeños es que sufren una tasa altísima de paro del 28%, y además ahora hay gente con empleo pero una precariedad tan grande que están por debajo del umbral de pobreza; hasta ahora valía la tasa de paro, ahora muchos trabajadores están cerca de la exclusión social por sus ingresos ínfimos. La desigualdad ha crecido de forma notable, hay un abismo tremendo entre los que han mejorado y empeorado, y en sanidad hay una merma importante. Por mucho que queramos reconstruir la verdad, es la que es. La demanda interna y el consumo están muy estancados, y mientras no mejore estaremos cojos.
130.000 de los 230.000 pensionistas que tenemos reciben pagas mínimas, que además han sido congeladas, el empleo público también tiene el sueldo congelado cinco años, y cientos de miles de personas en el sector privado están en empleo precario, y no pueden consumir más que lo imprescindible.
¿La crisis está siendo más intensa en Extremadura, dada la debilidad crónica de su tejido económico?
Se ha cebado con todos, y no ha sido solo una crisis económica sino que es también estratégica, del modo de planificar economía y los valoresque la inspiran; no tenemos por qué sufrirla más o menos que otros territorios, pero es cierto que tenemos un problema añadido por nuestro envejecimiento de población, por eso hay muchas personas con pensiones mínimas que poseen menor capacidad de consumo, y por otro lado una mayor tasa de población rural que tienen menor dinamismo frente a las ciudades, que notan antes la recuperación. Pero confío en la capacidad de reinventarnos, aunque me preocupa el tejido productivo que se ha quedado por el camino, empresas que formaban parte de nuestro paisaje y han desaparecido, sin que hayan aparecido otras. Falta que esas nuevas empresas que preveíamos cuando decíamos que muchos no volverían a encontrar trabajo en el mismo sector, y echamos de menos que surjan esos nuevos empleos.
Si Extremadura no ha quedado al margen de los recortes, y sin embargo ha incrementado su deuda hasta los 3.200 millones de euros, ¿adónde ha ido el dinero?
El actual modelo de financiación autonómica, que ha sido muy bueno para tiempos de bonanza, es muy malo para tiempos de crisis, es insuficiente y mientras tanto la sanidad no admite congelaciones, crece todos los años un 3% o 4% sí o sí, y eso aparece en las cuentas aunque le des una patada para el curso siguiente. Ahora el Ministerio le hace una quita a las comunidades con déficit y que entraron en el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) en 2010, el negocio que hemos hecho ha sido ruinoso; los extremeños, a través de la Junta, vamos a tener que devolver a los bancos el dinero con sus intereses, mientras otros no. Alguien tendría que dar alguna explicación, pero no la veo.
El nivel de deuda es relativo y siempre debe compararse con el presupuesto total, pero si es tal el nivel, que te impide hacer política redistributiva, entonces es cuando es excesivo; y a nosotros nos va a pasar que tenemos que pagar tendremos que pagar unos intereses mientras otros no.