Los votos de PSOE y Podemos convierten a Fernández Vara en presidente de Extremadura
Cuatro años después de haber perdido el gobierno regional, el PSOE vuelve a recuperar el timón de Extremadura. Los votos de los 30 diputados socialistas, sumados a los de los 6 de Podemos han impulsado a Fernández Vara la presidencia de la Comunidad en la primera votación de la sesión de investidura.
Victoria Domínguez, diputada de Ciudadanos, ha optado por una “abstención positiva” mientras que el PP se Monago se ha decantado por la abstención a secas al tiempo que se ha auto proclamado como única oposición, dado que desde su punto de vista Podemos y C’s han mostrado seguidismo con respecto a la candidatura de Vara para la investidura.
Cambio en la financiación
A Vara, a lo largo de sus diversas intervenciones como aspirante a la presidencia, ha insistido en la necesidad de que pedir al gobierno de la Nación un nuevo modelo de financiación, con un régimen fiscal diferente al actual, al menos hasta que Extremadura reduzca al 20% sus niveles de paro (en la actualidad ronda el 30%).
“Extremadura es una región al borde del abismo”, así ha retratado el portavoz socialista Valentín García la economía regional. En esa misma línea, Fernández Vara ha explicado que Extremadura no puede salir por sí sola de la crítica situación económica y por ello necesita un apoyo específico del resto del país, cuya salida podría pasar por ese nuevo régimen fiscal.
Un programa con una fuerte carga de medidas sociales (lucha contra la exclusión, ley de mínimos vitales, renta básica…) , atención preferente a la igualdad de género, plan de empleo juvenil… han sido algunas otras medidas enunciadas por el nuevo presidente regional.
A lo largo del debate de investidura, no faltaron algunas caras a cara con cierta tensión entre Vara y el ya ex presidente Monago. “No volveré a poner la otra mejilla”, llegó a decirle Vara a Monago, que ha defendido avances económicos en su legislatura .
Durante el debate de investidura, al igual que viene haciendo durante las últimas semanas, Monago ha insistido hasta la saciedad, en la existencias de un pacto de gobierno entre el PSOE y Podemos, pese a que unos y otros han replicado que no existe tal pacto y que al no existir mayorías absolutas será obligado hablar y negociar a lo largo de la legislatura.