La salud mental es la asignatura pendiente de los servicios sanitarios, pero también del conjunto de la sociedad, de ahí que sea imprescindible alcanzar mejores niveles de coordinación entre profesionales, usuarios y familias.
Así lo expuso el consejero de Sanidad, José María Vergeles, durante la celebración de la jornada “Un paso más en Atención a la Salud Mental”. En ella se acercaron a través de los expertos, los conocimientos y experiencias para evolucionar hacía la mejora de la calidad y el servicio en este campo.
Para Vergeles la jornada sirve para debatir el futuro, los retos y los avances que se pueden dar en el ámbito de la atención a las personas que tienen un trastorno de salud mental y que requieren que se mejoren las herramientas de atención. Estas últimas se tienen que adaptar a las necesidades de las personas que lo sufren, para incorporar a la comunidad a aquellos que tienen la enfermedad y le ha generado problemas, como en la inserción laboral, y para atender el entorno de la familia.
Ha sido un encuentro coordinado por la empresa de servicios sociosanitarios 'Grupo 5 Gestión y Rehabilitación Psicosocial' y el Instituto de Formación e Intervención Social. El director de Grupo 5, Alejandro Arribas, ha afirmado que la profesionalidad implica la evaluación de las necesidades, la constante formación y, como elementos “claves”, la participación de los usuarios y la lucha y sensibilización contra el estigma de la salud mental.
A ello, se suma el reto de la inserción social y laboral de los usuarios de los servicios de salud mental. En Extremadura, Grupo 5 atiende a 40 personas en el centro residencial de rehabilitación de Plasencia, 30 en el de Mérida y a 8 personas más en los pisos asociados a esas instalaciones.