El Grupo Parlamentario Vox ha tildado de “okupa” a la presidenta extremeña, María Guardiola, por acceder al cargo con el apoyo de los votos de su formación política sin que exista ya un acuerdo de gobernabilidad, y el PP ha devuelto esta misma expresión al diputado autonómico y senador de Vox, Ángel Pelayo Gordillo.
Este cruce de expresiones, contrapesos políticos y apoyos para gobernar se ha producido en el seno de la Asamblea extremeña durante el debate de una propuesta de impulso presentada por Vox pen la que ha exigido a la Junta que acometa de forma inmediata el proyecto de regadío de Tierra de Barros (Badajoz).
Más allá del posicionamiento de los grupos al respecto, pues el PP ya ha anunciado que votará a favor y, por tanto, la iniciativa saldrá adelante, la tirantez entre PP y Vox, socios de Gobierno hasta hace algo más de dos meses, ha quedado patente a tenor de las intervenciones de los diputados Juan José García (Vox) y José Manuel García Ballesteros (PP).
“El sanchismo es como el guardiolismo, ambos gobiernan sin haber ganado las elecciones, con extrema fragilidad y sin respetar los ideales tradicionales” de sus respectivos partidos, ha afirmado García quien ha recordado que el regadío de Tierra de Barros es para Vox “un proyecto nuclear para esta legislatura”. Por ello, según ha remarcado, existe una relación directa entre este proyecto, apoyo a los presupuestos y estabilidad de Gobierno.
En este marco, García ha apuntado que Guardiola es “una okupa” de la plaza del Rastro, donde se ubica la Presidencia de la Junta, pues sin ganar las elecciones accedió al cargo merced al entonces acuerdo de gobernabilidad con Vox.
“Para okupas, tiene usted uno en el Senado”, ha respondido García Ballesteros, en alusión al presidente del Grupo Parlamentario de Vox en la Asamblea extremeña, Ángel Pelayo Gordillo, quien fue designado senador en el marco del acuerdo PP-Vox para gobernar en la Junta; un acuerdo que rompió Vox hace algo más de dos meses.
García ha afirmado que el “guardiolismo” tiene cada vez menos credibilidad, “pega vaivenes” y sólo está preocupado por el voto del PSOE en cada votación parlamentaria. “Nada que ver con el PP de toda la vida, de las mayorías absolutas” de alcaldes extremeños como Fernando Pizarro, Miguel Celdrán y Pedro Acedo, entre otros, ha agregado.
“Aunque el guardiolismo está aquí -Cámara legislativa- instalado, en las ciudades y en los pueblos no esta instalada”, ha afirmado el diputado de Vox, quien ha recordado que el regadío de Tierra de Barros es para Vox “un proyecto nuclear para esta legislatura”. Por ello, según ha remarcado, existe una relación directa entre este proyecto, apoyo a los presupuestos y estabilidad de Gobierno.
A su juicio, el reciente anuncio de la presidenta extremeña de destinar 20 millones de euros a dicho proyecto con fondos regionales refleja que “Guardiola se ha caído del caballo”, pues hasta ahora “no tenía ninguna voluntad” de respaldarlo.
“Guardiola no se ha caído del caballo. Son ustedes los que se han caído del burro, que firmaron un pacto y renunciaron por cobardía de estar en uh Gobierno”, ha respondido García Ballesteros, quien ha desmentido que el PP esté negociando el proyecto de Tierra de Barros con el PSOE, como sí ha afirmado García.
Regadío en Tierra de Barros
En el marco del debate sobre la propuesta, el PSOE ha expuesto que su Gobierno dejó el citado proyecto de regadío “listo para ser licitado”, pero el Ejecutivo de Guardiola -ha añadido- optó por retraer más de 100 millones de euros para otras partidas. Asimismo, ha aseverado que dicha iniciativa agrícola no se puede acometer por fases, por lo que los 20 millones de euros anunciados por la Junta no sirven de mucho.
Para Unidas por Extremadura, el proyecto es inviable, de ahí que haya pedido al resto de grupos políticos que “no estiren más el chicle”. “Cuanto más lo estiremos, más tiempo estaremos engañando a los agricultores”, ha añadido.
Desde el PP, García Ballesteros ha afirmado que el proyecto sí se puede hacer por fases, pues el PSOE así lo tenía contemplado, y ha anunciado que solicitarán fondos al Gobierno central.