A los primeros colonos se les asignaban entre 4 y 8 hectáreas de tierras para trabajarlas. Así se levantaron en los años 60 los pueblos de colonización, ligados directamente al Plan Badajoz de regadíos.
Se formaron poblados de colonización en el Valle del Alagón, así como en las Vegas Altas y Bajas del Guadiana. Unos 60 en total en Extremadura de los 300 pueblos de creados en pleno franquismo.
Hay un elemento que les une, el arquitectónico. La Fundación “Docomomo” Ibérica de arquitectos los define como un ejemplo de la arquitectura moderna y sostenible. Elementos también importantes para el desarrollo rural y la fijación de la población.
El vicepresidente de esta fundación, Celestino García, destaca la importancia de los poblados de colonización de Extremadura como hitos en la arquitectura rural, ya que implican la racionalidad, el uso de materiales adecuados, la integración de “símbolos” rurales“ y la repoblación de estas zonas.
Considera que deben ser catalogados bajo figuras de 'patrimonio arquitectónico', “en pro de su futuro”, y que en esto deben colaborar las administraciones públicas la propia población.
Congreso en Badajoz
La Fundación “Docomomo” Ibérica celebrará el próximo mes de abril en Badajoz su décimo congreso. Se trata de una entidad internacional de documentación y la conservación de edificios, sitios y barrios del movimiento moderno. Su llegada a Extremadura viene a reconocer este tipo de arquitectura y analizar las experiencias adquiridas y el desarrollo del territorio.
El consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, destaca que la comunidad ofrece más de 400 kilómetros para poder analizar el punto central del foro, los 61 pueblos de colonización construidos en ella durante los años 60 con métodos y arquitectos modernos, y que acogen a casi 50.000 personas.