La Policía Nacional ha intervenido 18 toneladas de cobre procedente del robo de cable telefónico que era distribuido en chatarrerías de ciudades como Badajoz, en lo que se considera una de las mayores cantidades de este material recuperadas pertenecientes a una empresa de telefonía.
La investigación, según un comunicado de la Policía Nacional, comenzó en Córdoba tras tener conocimiento de que un grupo de personas estaba sustrayendo cobre del cableado de una empresa privada de telefonía.
En el transcurso de la operación se han detenido a cuatro personas a las que se les imputa un delito de receptación de cobre y pertenencia a grupo criminal.
Los detenidos robaban el cobre, principalmente por la noche, con “grandes medidas de seguridad para no ser descubiertos” y utilizaban herramientas de “gran calidad para dejar el cobre sin envolturas y así adquirir una mayor valoración al realizar su venta en el mercado”.
El material lo almacenaban en una nave situada en un polígono cordobés y desde ahí lo distribuían por todo el territorio nacional en camiones que alquilaban para su transporte, vendiéndolo en chatarrerías que operaban de manera fraudulenta.
Se pudo comprobar que la mayoría de los viajes que realizaban para distribuir el cobre tenían como destino chatarrerías situadas en las ciudades de Badajoz y Bilbao.
Los agentes solicitaron colaboración a agentes de la Policía Nacional de Badajoz, que corroboraron la participación del propietario de una de las chatarrerías de esta ciudad con el grupo criminal.
La investigación ha permitido esclarecer el robo de 18.254 kilos de cobre procedente principalmente del cableado de una empresa privada de telefonía cuyo valor en el mercado conllevaría unas pérdidas de 800.000 euros aproximadamente.