La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

Fexbares teme que el aumento de contagios lleve a nuevas restricciones

La Federación Extremeña de Bares y Restaurantes (Fexbares) ha mostrado el temor del sector a que el aumento de contagios de coronavirus lleve a nuevas restricciones en la comunidad autónoma, después de que los cierres perimetrales establecidos causen ya importantes perjuicios a los establecimientos de los municipios donde se decretan.

El presidente de Fexbares, José Parodi, ha manifestado a Efe que los cierres de localidades y las consiguientes cancelaciones de reservas turísticas suponen pérdidas de clientes en una temporada veraniega “fundamental” para muchos municipios, tal y como les trasladan los propios empresarios.

Al sector le perjudica la reducción de eventos culturales, deportivos o de ocio, unas actividades que atraen público, de lo que se benefician tradicionalmente bares y restaurantes.

Ante este escenario, teme que la incidencia del coronavirus continúe al alza y que nuevas medidas “perjudiquen” al sector, y que el verano, una fecha “clave”, acabe “dándose por perdido, lo que sería un gran perjuicio”, según Parodi.

La hostelería ve con preocupación que puedan establecerse toques de queda o restricciones de horarios en los establecimientos, tal y como se han decretado en otras regiones, ya que en verano “la ciudadanía no sale a la calle en Extremadura mientras se mantienen las horas de sol”.

Ante esta tesitura, la reducción del horario en una sola hora durante el periodo nocturno en el cual hoy bares y restaurantes desarrollan su actividad supone “perder un 25 por ciento de la jornada diaria, lo que es mucho”.

Parodi ha recordado además que estos establecimientos están considerados “zonas seguras”, y decretar restricciones en los locales para “incentivar la proliferación de personas en espacios que no son precisamente seguros no parece que sería la mejor solución”.

Estos temores llegan además tras un primer semestre en el que el sector se vio perjudicado por las restricciones de la tercera ola y “después de que las navidades tampoco fueran buenas para el sector”.

Esta situación ha provocado que los establecimientos solo recuperasen durante los seis primeros meses del año, de media, un 60 por ciento de su actividad en relación con los valores alcanzados habitualmente durante un primer semestre de un año normal, ha precisado Parodi.