- Hasta el momento no ha trascendido la investigación de la Guardia Civil, ni han dado resultado las batidas organizadas
La madrugada del 4 al 5 de julio se cumple un año de la desaparición en extrañas circunstancias de Manuela Chavero, vecina de 42 años de Monesterio. Un tiempo en el que ni su familia ni sus vecinos han cejado en el empeño para que su caso no caiga en el olvido.
Han convocado para el próximo 8 de julio una concentración que esperan masiva y a la que se espera que asistan representantes de diferentes instituciones. Entre ellas el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, según explica Emilia Chavero, hermana de la desaparecida. La concentración será a las once de la mañana en la plaza del pueblo, presidida desde hace un año por una gran pancarta con la fotografía de Manuela Chavero.
Manoli, como la conocen en este pueblo del sur de Badajoz limítrofe con la provincia de Sevilla, estuvo la noche del 4 de julio de 2016 con una amiga, la última persona que la vio, y después regresó a su casa. Al día siguiente, en su domicilio nada estaba forzado, sobre su cama estaban los pantalones que había llevado el día anterior, la luz del salón y de la cocina estaban encendidas, al igual que la televisión, y su cartera y su teléfono móvil estaban allí, con una última conexión a las 01:55 horas del 5 de julio.
Desde entonces, nada se ha sabido o trascendido de la investigación oficial de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, ni han dado resultado las batidas llevadas a cabo, algunas organizadas por la Fundación QSD Global Europea, que preside el periodista Paco Lobatón.
Tampoco arrojó nada el rastreo que hizo el Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Badajoz y Sevilla en el pantano de Tentudía, con el apoyo de un robot submarino.
En estos doce meses incluso se ha tomado declaración a una persona en calidad de investigada, que quedó en libertad sin ninguna medida cautelar, y la Guardia Civil intervino tres vehículos a vecinos del municipio para analizarlos.
Emilia Chavero ha confesado que la familia “ya está desgastada de todo lo que lleva pasado”, porque tenían la confianza que a estas alturas ya habría alguna noticia, aunque no duda en alabar el trabajo que están llevando a cabo los investigadores.
“Yo sé que tienen cosas y por eso el caso sigue bajo secreto de sumario”, asegura Emilia Chavero. Está pendiente de una reunión con el juez de Zafra, actualmente de vacaciones, para plantearle algunas cuestiones, como poder acceder a la casa de su hermana, que lleva un año precintada, algo que no ha pasado en casos parecidos.
Asimismo espera que le pueda aportar alguna información “porque esto agobia cada vez más”, e insiste en que ella seguirá “muy encima” de todo porque no quiere que se olvide, sino que se aclare lo que pasó, y le da igual “que pase un año o dos”.
El alcalde de Monesterio, Antonio Garrote, ha reconocido que estos doce meses se han vivido “con incertidumbre y mucha desazón”, que ha sido difícil sobre todo para la familia, pero también para todo el pueblo.
El primer edil ha agradecido el gran apoyo recibido desde todos los municipios de la región e incluso otras partes de España, y ha asegurado que cualquier iniciativa que sirva para que la búsqueda de Manuel Chavero “esté en la mente de todos” contará con el apoyo del ayuntamiento.