El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha decidido ignorar institucionalmente la cumbre hispano alemana que se celebra esta semana en A Coruña. El máximo mandatario del Gobierno gallego ha declinado la invitación, que recibió la noche de este lunes, para representar a Galicia en el evento. A la hora de configurar su agenda Rueda ha preferido no alterar su planes por un convite que recibió a solo dos días del evento.
La invitación para representar a Galicia en la cumbre de alto nivel llegó a la Xunta de Galicia durante la noche del lunes. En ese momento el equipo del presidente de la Xunta optó por no alterar la agenda del presidente gallego, que durante la tarde de la recepción tenía previsto presidir la entrega de unos premios al mérito deportivo en Santiago. Los representantes del Gobierno gallego decidieron entonces ofrecer que Rueda fuese sustituido por uno de sus vicepresidentes pero, según fuentes de la Xunta, la Delegación del Gobierno se negó alegando que la invitación era personal e intransferible. Finalmente la Delegación del Gobierno en Galicia cambió de actitud y aceptó que el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, represente a la Xunta en el encuentro.
Fuentes de la presidencia de la Xunta aseguran a elDiario.es que “a pesar de estar anunciada hace semanas la primera comunicación oficial que recibió la Xunta sobre la cumbre fue una invitación oficial al presidente a menos de 48 horas de la celebración del acto lo que hizo imposible su presencia porque tenía ya otros compromisos previamente adquiridos”. Desde Delegación de Gobierno, sin embargo, matizan que “la invitación se envió a todas las autoridades al mismo tiempo el día que se confirmaron los horarios definitivos de la cumbre”.
La inasistencia del presidente gallego en el encuentro hispano alemán contrasta con lo sucedido en el pasado. Cuando en 2014 la canciller Ángela Merkel visitó Galicia invitada por el Gobierno de Mariano Rajoy el entonces presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, formó fila junto a otras autoridades para recibirla en la escalerilla del avión que la trasladó desde Berlín hasta Santiago. Además de ese primer contacto el presidente de la Xunta acompañó a la canciller alemana en la visita que se había preparado para ella en la catedral de Santiago.
Negocios por dos mil millones de euros
Alemania y Galicia mantienen unas importantes relaciones comerciales con movimientos anuales cercanos a los dos mil millones de euros. La balanza comercial de esos acuerdos ha sido favorable a Galicia en los últimos años con saldos comerciales que en ocasiones, como en 2016, se situaron por encima de los 800 millones de euros. Esas buenas cifras se han ido matizando en los últimos ejercicios, hasta reducirse a los 400 millones de 2020 favorables a la cuenta gallega, tal y como recoge un informe elaborado por la Confederación de Empresarios de Galicia en 2021.
La principal materia que Galicia exporta a Alemania son vehículos, seguido de diferentes productos textiles. En la lista de la compra que Galicia hace en Alemania los vehículos también ocupan el primero lugar, seguidos de maquinaria y productos de fundición de hierro y acero.