Medio centenar de personas han partiicipado este martes en la concentración de apoyo a Nicanor Acosta. El conocido activista, de 76 años, fue multado con 600 euros por participar en el intento de paralización del desahucio de la anciana Aurelia Rey en febrero de 2013. El hombre fue sancionado por, según la policía, “probación de reacciones en el público que alteran o pueden alterar la seguridad ciudadana” y recurrió este expediente, motivo por el cual se ha celebrado la vista en el juzgado del contencioso-administrativo número 4 de A Coruña.
En las puertas, miembros de Stop Desahucios de A Coruña y de Ferrolterra, representantes de las plataformas de preferentistas y numerosos vecinos han participado en una protesta a la que han acudido tres concejales del gobierno local de A Coruña de la Marea Atlántica (Rocío Fraga, Daniel Díaz y María García), la edil del BNG, Avia Veira; el ex concejal de EU, César Santiso; los diputados de AGE, Yolanda Díaz y Antón Sánchez; la responsable local de Podemos, Isabel Faraldo; o el bombero Roberto Rivas, que se había negado a facilitar el desalojo de Aurelia Rey en la misma acción y que también había sido sancionado por “provocar reacciones” en la ciudadanía presente.
Ese mismo cargo fue el que le imputó el Estado a Nicanor Acosta, que califica de “totalmente injusta” su sanción “y las de todos” los que luchan por el cumplimiento “de un derecho básico como es la vivienda”. “Sencillamente, iba relatando lo que pasaba con mi megáfono”, explica el afectado, que cree que “los desahucios no tienen sentido, y menos el de una anciana”. Tras la vista aseguró “confiar en la justicia” y prometió seguir en la lucha social. “Hasta el final de mi vida me dedicaré a que se haga justicia”, insistió, después de que, tanto antes como después del juicio, cogiese de nuevo el megáfono para, como suele hacer en cada movilización, gritar sus consignas. “Nin casas sen xente, nin xente sen casa”, “o pobo ten dereito a pan, traballo e teito” o “vivir é un dereito, ter casa tamén” fueron algunas de las frases que repitieron los allí presentes.
El abogado de Nicanor Acosta, Antonio Vázquez, destacó la “ambigüedad” de un atestado policial que fue trasladado al juzgado varias semanas después de los sucesos y que fue matizado en agosto, según los agentes, tras los alegatos del propio activista. E incluso destacó las semejanzas de este caso con el de Francisco Jorquera, portavoz del BNG en el Parlamento, que “fue absuelto” y en cuyo atestado también había “incongruencias” al no aclararse en ninguno de ellos ni la hora exacta de lo ocurrido ni las expresiones llevadas a cabo por el veterano activista.
A la salida de la vista por apelación, en la que declararon tres testigos, la abogada que ejerció su defensa aclaró que reclaman que se anule la sanción y que confía en que le sea retirada la multa, que no es la única que tuvo que afrontar Acosta, que acumula más de 2.700 euros por más de una docena de sanciones tras participar en varias protestas.
Fueron muchos otros activistas los multados en A Coruña en los últimos años tras participar en aquella movilización delante de la casa de Aurelia Rey, tras la que también fueron expedientados varios cargos públicos del BNG y de IU. Para la letrada, la actuación del activista entra dentro del derecho fundamental de la manifestación, junto con el de la libertad de expresión, aunque el abogado del Estado alegó que puede entenderse como “alteración del orden público”.
En el caso de Nicanor Acosta, y de muchos otros activistas, la “solidaridad de mucha gente”, como aclara Stop Desahucios, les permitió garantizar la cobertura económica para sufragar las sanciones tras la campaña Múltannos a nós para asustarte a ti que la plataforma realiza desde 2013. “Un éxito del compromiso colectivo frente a las amenazas y la persecución que viene realizando el Gobierno contra los movimientos sociales a través de la policía nacional y demás organismos estatales de represión”, dice el colectivo, que denuncia la “injusticia y acoso que está sufriendo nuestro compañero”.
Nicanor Acosta es un conocido activista de A Coruña, presente en todas las manifestaciones, concentraciones y luchas sociales de la ciudad. Siempre con su megáfono, lanzando proclamas o cediéndolo para que otros se expresen. Comprometido políticamente con los más desfavorecidos desde la dictadura, mantiene ese compromiso y colabora con múltiples colectivos, desde Stop Desahucios hasta las plataformas de los preferentistas o la Marea Atlántica, cuya lista electoral integró en las pasadas elecciones municipales en el puesto 19º. Es, además, 'Republicano de Honra' de 2015, galardón concedido por la Comisión por la Recuperación de la Memoria Histórica. “Muestra el camino a seguir”, dijo sobre él Yolanda Díaz, viceportavoz de AGE, que cree que Nicanor “es un ejemplo de dignidad”.