“Permanente concurrencia de relaciones entre Gerardo Crespo con políticos y funcionarios especialmente relacionados con las subvenciones y adjudicaciones” de las que su grupo empresarial “podía ser y era destinatario”. Así resume la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional los “constantes” contactos del empresario coruñés que presuntamente, lideró el fraude de subvenciones en cursos de formación investigado en la Operación Zeta. La investigación resalta la “importancia” de estas “relaciones de confianza con políticos y funcionarios locales y de la Xunta” para obtener subvenciones que, en su mayor parte, iban a parar al bolsillo de Crespo y no a la organización de cursos. Es posible que, por ese motivo, Crespo y sus empresas cuidasen a sus contactos con regalos e incluso sumas de dinero en metálico que, en el caso del PP, dicen los agentes, sumaron 17.000 euros.
Según consta en informes incluidos en el sumario del caso, a cuyo contenido ha tenido acceso este diario, los agentes encontraron en los ordenadores de Azetanet, una de las empresas de Crespo claves en la supuesta trama fraudulenta, una hoja de cálculo en la que, bajo el nombre de regalos clientes, se apuntaban los regalos a distribuir entre diversos cargos de la Xunta y del PP con motivo de la Navidad de 2010. La lista está encabezada por la conselleira de Traballo, Beatriz Mato, quien un año antes había sido nombrada Coruñesa del Año por una de las asociaciones de Crespo. A Mato, según este listado, le correspondería “lotería” más un bolso que le habrían sido remitidos a su casa.
La lotería es el obsequio más común en una lista en la que, no obstante, a determinadas personas se les asigna, como a la conselleira, un regalo adicional. A Joaquín Vila, entonces jefe de servicio de Empleo en la Consellería, le correspondería también una cesta navideña -Vila declaró hace escasos días que Crespo enviaba “constantemente” regalos pero que no influían en su acción en la Xunta-, lo mismo que a Odilo Martiñá, director general de Traballo hasta el pasado septiembre. Junto a la lotería, siempre según esta lista, se envió “vino” para el presidente de La Voz de Galicia, Santiago Rey, y un jamón para una persona identificada como “Manolo Barral”, de la que no se especifica responsabilidad.
Los envíos únicamente de lotería fueron, según la investigación, mucho más numerosos y llegaron desde al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo hasta Carlos Negreira, actual alcalde de A Coruña. Igualmente, figuran como receptores Diego Calvo, presidente de la Diputación coruñesa, José Manuel Álvarez Campana, que en ese momento dirigía el ente público Portos de Galicia, y otros cargos y jefes de servicio de la Consellería de Traballo.
Una de las listas de regalos encontradas por la Policía en los ordenadores de Azetanet
Los presuntos pagos al PP
Estos y otros regalos de mayor valor económico -sufragados, al menos en parte, con la “caja B” de Crespo, según los investigadores- eran empleados por Crespo como una vía más para intentar “remover los obstáculos” que se le presentaran para obtener dinero público. La Policía ve de “especial interés en el ámbito penal” las “evidencias” de que “algunos” de estos “políticos y funcionarios” recibían “cantidades económicas o regalos” mientras, paralelamente, eran “presuntamente amañados” varios “concursos públicos” para otorgarle adjudicaciones a las empresas de la trama.
En este contexto, los agentes ven claro que Gerardo Crespo “daba cuenta a responsables políticos de un partido o de otro de su participación” en los concursos y convocatorias de subvenciones, ya fuera “de manera directa o mediante la intermediación de personas, a las que encargaba la realización de gestiones con responsables del Partido Popular, remunerando la ejecución de las mismas”. Así, la Policía observa en la contabilidad de Azetanet “anotaciones del pago de importes económicos a responsables públicos encargados de la concesión y control de subvenciones, así como el abono en metálico de una cantidad” cifrada en los mencionados 17.000 euros “al Partido Popular”. De ellos, 15.000 fueron presuntamente pagados “dos semanas antes de las últimas elecciones generales”, en 2011.