El sector del telemárketing sufre ya en Galicia los despidos por baja médica que ha avalado el Constitucional

El aval del Tribunal Constitucional al despido objetivo por faltar un número determinado de días al trabajo, aunque sea por una enfermedad y de forma justificada, se ceba ya con los sectores más precarizados, como el del telemarketing en Galicia. La empresa Extel, subcontrata de Movistar y perteneciente al grupo Adecco, ha tirado ya de esta posibilidad ahora legitimada por la Justicia para despedir de golpe a tres personas en A Coruña la pasada semana y una más en esta. La decisión, que representantes de los trabajadores consideran la primera de una ola progresiva, es vista también como una “estrategia” empleada por la compañía para prescindir de personal “sin necesidad de ERE ni de mayor conflicto”.

Hace tan sólo unas semanas, el Constitucional avaló el despido por causas objetivas en 2016 de una trabajadora de una empresa que alegó que se había ausentado nueve días de los cuarenta hábiles en dos meses consecutivos, más del 22% de las jornadas. A pesar de ser ausencias justificadas, excepto una, mediante bajas por incapacidad temporal, el alto tribunal le dio la razón.

Aludió la compañía al artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores, introducido con la reforma laboral de 2012. En él se señala que son causa de despido objetivo “las faltas de asistencia al trabajo, aún justificadas pero intermitentes, que alcancen el 20% de las jornadas hábiles en dos meses consecutivos siempre que el total de faltas de asistencia en los doce meses anteriores alcance el 5% de las jornadas hábiles o el 25% en cuatro meses discontinuos dentro de un período de doce meses”.

Ahora, este mismo artículo ha sido empleado por Extel. CGT, sindicato mayoritario en una empresa con unos 700 trabajadores en A Coruña, para justificar los despidos de tres personas que “seguramente no serán las últimos”. “La compañía dice que tiene la ley de su mano y sabemos cuáles son sus intenciones”, dice Adrián García, delegado del sindicato. Solo un día después, las centrales CIG y CCOO daban cuenta de otro despido en la misma firma argumentando causas semejantes.

No es el primer caso. En el mismo sector, la empresa Konecta, con sede en la localidad coruñesa de Bergondo, despidió en el pasado mes de octubre a un delegado sindical de CCOO “por ponerse enfermo”, tal y como denunció el sindicato, después de aplicar el mismo artículo 52 a pesar de estar las bajas justificadas. “Una muestra más del grado de deshumanización al que nos tiene acostumbrados esta firma”, había denunciado Comisiones.

Una estrategia “orquestada”

Ahora, según denuncia a CGT, Extel ve en el aval del Constitucional la puerta abierta para “adelgazar el plantel de manera más barata, sin necesidad de hacer un ERE y con mucho menos conflicto”. Además, culpan a Movistar de ser cómplice de una estrategia “orquestada” de la que esperan un goteo de despidos en los próximos meses.

Así, la representación del personal ha convocado ya una huelga de 24 horas el próximo 9 de diciembre, que incluye una concentración a las 12 de la mañana. Aseguran que la intención de la empresa viene de lejos y recuerdan que el pasado 25 de noviembre, días antes de los tres despidos, la dirección de Extel comunicó de manera unilateral “un cambio radical” en los criterios establecidos para las ausencias por causas de salud.

Durante 20 años, el personal podía justificar su ausencia con un justificante médico o parte de reposo. Ahora, la empresa solicita una baja médica, aunque sea de un solo día. La misma medida intentó aplicarla hace un año, pero la CGT presentó un conflicto colectivo que hizo que diese marcha atrás en la decisión después de un acuerdo en el servicio de mediación (SMAC). A ese mismo servicio acudirá ahora el sindicato el próximo 16 de diciembre, cuando también hay convocada una movilización y un paro de cuatro horas.

“Ya habíamos advertido de que este cambio de criterio obedecía a una estrategia entre Movistar y Extel para despedirnos por haber caído enfermas. La sospecha se convirtió en realidad cuando se empezaron a comunicar despidos por este motivo el pasado viernes”, dice CGT, que lleva a cabo una campaña de denuncia en las redes bajo la etiqueta #ProhibidoEnfermar.

El sindicato, además, advierte de que la empresa no sólo exigirá la baja para cualquier ausencia, sino que ha amenazado con pedir el nombre del médico de cada uno de los trabajadores que pongan algún obstáculo a la medida. Adrián García, delegado de CGT, alerta también de los “problemas de salud personal y laboral” por la posibilidad de que muchas personas acudan a trabajar con alguna dolencia ante el temor de poder ser despedidos o dever cómo se le reduce el salario cada vez que tiene que ausentarse, aunque sea un día, del puesto. “Trabajamos hasta 80 personas en una misma sala”, advierte sobre la situación de un personal en su mayoría a tiempo parcial y con sueldos que rondan los 700 euros mensuales.

La situación es otro golpe más en la precarización del sector del telemarketing. El personal de Extel ya vio en el pasado verano como la empresa recortó drásticamente los complementos salariales mientras Movistar subía las tarifas y después de aplicar un ERE hace tres años. En Ourense, en el pasado mes de noviembre, Naturgy decidía deslocalizar el servicio de atención telefónica que tenía en Galicia, afectando nuevamente un sector que cuenta con unos 10.000 trabajadores y trabajadoras en Galicia y unos 80.000 en el conjunto del Estado.