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Personal de la CRTVG amplía sus protestas contra el control del Gobierno de Feijóo con una inédita manifestación

Nunca había pasado. Al menos, no en este formato. Lo más semejante la una manifestación contra la manipulación informativa y por el cumplimiento de la ley en los medios públicos de comunicación se produjo en 2011, cuando el personal movilizado organizó un 'Telexornal' reivindicativo en el centro de Santiago durante una huelga por razones semejantes cuando la legislación de la CRTVG estaba en pleno proceso de reforma. Pero lo de este sábado pretende ser diferente. La manifestación Pola dignidade dos medios públicos  [Por la dignidad de los medios públicos] impulsada por el comité que representa al personal de la Televisión de Galicia y de la Radio Galega, apoyada también por su comité homólogo en RTVE Galicia, llega después de dieciséis 'viernes negros', 16 semanas de movilización sostenida contra las “ataduras” gubernamentales de la información.

“Vestimos de negro los viernes para intentar llamar la atención sobre la manipulación informativa, el desmantelamiento de los medios públicos y las dificultades crecientes para desarrollar nuestro trabajo con criterios profesionales”, explican desde Defende a Galega, el colectivo impulsado por los propios profesionales al calor de los viernes negros. “Nuestro compromiso no es tanto con la audiencia como con el conjunto de la sociedad gallega” y por eso el llamamiento de la manifestación va dirigido a toda ella. Quieren, en definitiva, que “no nos den por perdidos”, sino que “pidan que lo hagamos mejor, que trabajemos con la máxima honestidad e independencia”, que “hagan valer el derecho ciudadano a disponer de unos medios de comunicación públicos y de calidad”.

A juicio del personal movilizado, nada de esto es posible “cuando un partido político, una corporación, una minoría organizada o el propio Gobierno se infiltran de tal manera en la TVG y en la Radio Galega que es capaz de imponer sus criterios de selección de noticias, su argumentario y sus intereses particulares”. En ese punto, advierten, los medios públicos “pierden su razón de ser” porque el derecho a la información que está en su esencia “se pervierte” y “ya no sabemos para quién hacemos nuestro trabajo” o “lo sabemos demasiado bien”, matizan.

Advertencia a los partidos

En este contexto, el personal que impulsa las movilizaciones de los viernes negros y la manifestación de este sábado lanza una advertencia al conjunto de partidos políticos: desde el PP en el Gobierno hasta los grupos de la oposición, En Marea, PSdeG y BNG, que ya han manifestado el apoyo a las protestas. “La CRTVG no forma parte del botín que se llevan los partidos que ganan las elecciones” y por eso “no podemos permitir que la dependencia del Gobierno de la Xunta o de las formaciones políticas” se convierta en “crónica en los medios públicos”. “Los propios partidos son conscientes de la gravedad de la situación”, creen. Sólo así se entiende que aprobasen hace siete años una nueva ley de medios con medidas como la creación del Consejo de Informativos que “vele por la independencia, veracidad y objetividad de los contenidos”. “Pedimos -recuerdan- como primer paso sólo eso, que se cumpla la ley”.

Después de varias semanas en las que la cúpula de la CRTVG ha intentado restar importancia a las protestas, el personal que participa en ellas se dirige a la dirección en la víspera de la manifestación, que parte a las 10:30 de este sábado de la sede corporación pública en las afueras de Santiago y rematará a las 12:30 en la Praza das Praterías, en el centro de la capital gallega “Le pedimos que se libere de ataduras, que sea ambiciosa, que nos proponga objetivos verdaderamente profesionales” y que “podamos diseñar una agenda informativa diferente, que seamos los primeros en llegar a las noticias y en contarlas de la mejor manera posible”. Que “seamos los medios que vertebren el país con el refuerzo de los actuales centros de trabajo y la recuperación de las delegaciones cerradas en 2010”, agregan.

Tras cuatro meses en los que la dimisión de los presentadores del Telexornal Serán y la amenaza de sanción contra una de ellas, Beatriz Moyano, ha agitado todavía más el escenario, en el seno del personal movilizado la voluntad es la de seguir adelante aunque la esperanza sea relativa. “No podemos claudicar en nuestra misión específica en tanto que medios públicos: intervenir allí donde una información de calidad es decisiva para que los ciudadanos puedan participar responsablemente en los asuntos de todos, en la política entendida en su sentido más cabal”, concluyen.

En los últimos días a movilización de este sábado ha sumado numerosos apoyos. Más allá de la oposición parlamentaria gallega, secundan las reivindicaciones comités de otros medios públicos como TVE, TV3 o Telemadrid, así como la Academia Galega do Audiovisual y otras organizaciones del sector de las artes escénicas. También han llegado apoyos desde diversos ayuntamientos, por parte de los principales sindicatos, de entidades como A Mesa pola Normalización Lingüística y de periodistas de diversos medios de comunicación, así como de ciudadanía a título individual que avanza a través de las redes sociales su intención de acudir a la manifestación.