“Yo sólo tomé una decisión política, la de garantizar los recursos necesarios para que se hiciese el AVE”. Esa fue la explicación que ofreció este martes en Bruselas el exministro de Fomento del PSOE y ahora eurodiputado, José Blanco, cuando fue preguntado por la reclamación de las víctimas del accidente de Angrois para que comparezca en la comisión de investigación política sobre el siniestro que se va a desarrollar en el Congreso de los Diputados. La pregunta partió de un grupo de periodistas desplazados a Bruselas por la Comisión Europea y el Eje Atlántico de ciudades de Galicia y el Norte de Portugal en el marco de una reunión con eurodiputados de la eurorregión para conocer su trabajo comunitario.
La argumentación que viene ofreciendo Blanco sobre sus posibles responsabilidades políticas en el accidente de Angrois es la de que, como ministro, él sólo decidió que el AVE gallego fuese una prioridad para el Gobierno. “Otro tipo de decisiones que se fuesen adoptando con criterios técnicos o no” sobre la concreción de esa decisión política, dice Blanco, no son responsabilidad suya sino de quien las tomase.
Sobre la propia creación de la comisión de investigación política en el Congreso, Blanco negó que viniera rechazándola hasta ahora “por temor” y aseguró que lo hacía “por coherencia”. Según el socialista, su postura, tanto en el caso de Angrois como en cualquier otro, es la de que “entre tanto haya un proceso judicial en marcha, no debería haber una comisión” política paralela.
Los propios socialistas argumentan de manera oficial que su cambio de postura se debió a la aparición de nuevos datos en la investigación judicial. Sin embargo, otras fuentes ligan el cambio a los cambios en la propia dirección del PSOE tras la vuelta a la secretaría general de Pedro Sánchez. Un argumento que se vería reforzado por el hecho de que no hay grandes novedades en la instrucción judicial en los últimos años sino que los defectos de seguridad que ya se conocían ahora sí son consideradas relevantes.