La factoría de PSA Citroën de Vigo es uno de los mayores centros de trabajo de Galicia. Entre la fábrica de automóviles y las empresas, unas 9.000 personas acuden diariamente a las cadenas de montaje. Los sindicatos denuncian que las medidas hasta ahora adoptadas por la dirección para contener el coronavirus son “estéticas” y reclaman “sentido común”: la paralización de la producción.
CUT, CIG, Comisiones Obreras y UGT se reunieron ayer, domingo, para denunciar que “no se cumplen las garantías preventivas mínimas exigidas por el Gobierno para el desarrollo de la actividad de la planta” de PSA Citroën en Vigo. Calificaron las medidas adoptadas por la empresa de “insuficientes” y exigieron “la paralización inmediata de la producción”. Por lo menos hasta consensuar “un protocolo compartido” entre propiedad y representantes de los obreros.
“La situación de propagación potencial en el centro de Vigo es evidente”, señala Víctor Mariño, delegado sindical de la Central Unitaria de Traballadores (CUT), “por más que diga la dirección. Ellos afirman que no hay ningún caso confirmado, pero si hay varios operarios en cuarentena”. No solo en las cadenas de montaje existe riesgo. Mariño habla de las zonas comunes como vestuarios o cafetería. “Lo de mantener un metro y medio de distancia es imposible”, aduce.
Según explica el sindicalista, la paralización ni siquiera tendría que afectar las cuentas de la empresa. “Tenemos un excedente de jornada de diez días”, expone. Se refiere a un mecanismo pactado en el convenio de la empresa para hacer frente a parones en la producción y que ahora proponen usar como medida contra el virus “sin consecuencias económicas”.
En la tarde de este lunes, el comité de empresa se reunirá con la dirección y le pedirá que “abandone su obstinación”. “Ni siquiera podemos hacer una asamblea de trabajadores”, arguye Mariño, “pero si la dirección no entre en razón, pediremos una inspección de trabajo. Algunas auxiliares ya están parando y hay problemas de piezas”.