Galicia avanza en la desescalada. Este viernes el Gobierno central ha autorizado a la comunidad autónoma a pasar a la fase 2 de lo que el propio Ejecutivo denomina “transición hacia una nueva normalidad”. A partir del lunes, 25 de mayo, los gallegos podrán sentarse dentro de los locales de hostelería o ir al cine -con aforos limitados a un tercio- y entrar más en más comercios. En esta fase, no habrá ya franjas horarias para salir a la calle, aunque sí horarios preferentes para población vulnerable.
Las medidas de protección contra la epidemia de coronavirus se van relajando. Además de abrir el interior de bares y restaurantes y ampliar el aforo del comercio minorista al 40% -siempre con distancia de dos metros entre clientes-, los cines y teatros volverán a funcionar con un tercio de las butacas y se podrá ir a los centros comerciales. Podrá haber “actos y espectáculos culturales” para menos de 50 personas en lugares cerrados (1/3 de aforo) y de menos de 400 al aire libre, siempre con el público sentado y manteniendo la distancia.
Los hoteles abrirán sus zonas comunes también a un tercio de capacidad. Y pescadores y cazadores podrán definitivamente volver a ríos y montes. En materia deportiva, se permitirán los entrenamientos básicos en ligas no profesionales y los totales en las profesionales. Estas últimas reabrirán con partidos a puerta cerrada o con limitación de aforo.
Para solicitar el pase a la segunda fase de la desescalada, la Xunta de Galicia remitió un informe de 107 páginas que no se ha hecho público. En él, afirmó el Servizo Galego de Saúde (Sergas) en una nota de prensa, se recogían 55 indicadores sobre la evolución de la pandemia, se señalaba que 306 de los 313 ayuntamientos gallegos llevaban tres días sin casos de transmisión comunitaria -sin especificar cuáles- y se solicitaba la movilidad libre entre las cuatro provincias gallegas.
“Con la lógica alegría” recibió el presidente de la Xunta la noticia en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Gobierno. Alberto Núñez Feijóo consideró que la comunidad ya estaba a comienzos de esta semana, cuando la Xunta presentó su propuesta, en condiciones para pasar a la fase 2. A pesar de este avance en la desescalda, el jefe del Ejecutivo gallego insistió en que el Gobierno acepte la movilidad entre provincias y acepte las alegaciones que trasladó la Xunta al respecto. En este sentido, Feijóo indicó que la Xunta solicitó alivios puntuales para esta restricción de movilidad en varios supuestos, como la visita a familiares mayores, en los ayuntamientos limítrofes entre provincias o para pernoctar en segundas residencias que se encuentren en otra provincia.