La portada de mañana
Acceder
El aval del PPE a la ofensiva contra Ribera aboca a la UE a una crisis sin precedentes
Sánchez impone al PSOE evitar el cálculo partidista en la crisis valenciana
OPINIÓN | El extraño caso del doctor Óscar y el señor Puente, por Enric González

Feijóo acusa al Gobierno central de eludir sus competencias en Educación al no definir con cuántas materias suspensas se pasa de curso

Galicia se desmarca de las comunidades gobernadas por el PP que se han opuesto a la instrucción del Ministerio de Educación para el final del curso escolar y acatará la medida, para la que, sin embargo, no ahorra en críticas. Seguir la propuesta del Ministerio es, para el presidente de la Xunta, “la solución menos mala”.

En su comparencia tras la reunión semanal de su Gobierno, el jefe del Ejecutivo gallego afirmó que la Xunta “discrepa” con la orden pero que va a “intentar mantenerse en las líneas que diga el Ministerio, para crear menos confusión y menos tensión en las familias y en los docentes”, a diferencia de comunidades como Madrid, Murcia o el País Vasco. También, dijo Feijóo, por una cuestión “de coherencia”, para “preservar mejor la igualdad entre los alumnos” de diferentes territorios.

El presidente de la Xunta acusa al Gobierno central de no ejercer sus competencias para “establecer las condiciones en las que se debe pasar un curso”. Las críticas de Núñez Feijóo al Gobierno de Pedro Sánchez se centran en que no se ha regulado con cuántas asignaturas se puede pasar un curso, especialmente en los finales de ciclo de ESO y Bachillerato. Un punto que, como él mismo indicó, está regulado en la vigente Ley orgánica para la mejora de la calidad educativa (Lomce) que indica que se puede superar el curso con dos materias suspensas.

Núñez Feijóo insistió en que el Ejecutivo central está “eludiendo” sus competencias y que “dice que va a regular en una orden que aún no se publicó”. A pesar de que Gobiernos del PP indicaron su intención de no acatar la instrucción de Ministerio de Educación, el presidente de la Xunta considera que cada gobierno autonómico no puede hacer lo que quiera porque situaría al alumnado en diferentes condiciones, según razonó.

Feijóo, que en la misma línea que se manifestó el ministerio también pidió que se retome el curso escolar en sus últimas semanas “si la situación epidemiológica lo permite”, calificó de “situación de indefinición bastante poderosa” el estado de la educación durante esta crisis sanitaria. Una crítica similar a la que el sindicato mayoritario en Educación, CIG Ensino, realiza al Gobierno de Feijóo desde la suspensión de clases y que se repitieron con el inicio del tercer trimestre. La central sindical lamentar que el profesorado comienza este último periodo “sin indicaciones sobre la evaluación y sin saber cómo actuar ante la brecha digital”.