La UE supervisará en 2020 si España vigila correctamente la radiactividad en la costa gallega

Un año más tarde de lo previsto inicialmente, la Comisión Europea asegura que en 2020 verificará si España está vigilando correctamente la radiactividad de la costa gallega. Una supervisión que tiene su origen en diversas preguntas formuladas hace meses por los entonces eurodiputados gallegos José Blanco (PSdeG) y Ana Miranda (BNG) después de que Praza.gal publicase una investigación sobre el limitado o nulo conocimiento que una docena de entidades internacionales y estatales admiten tener sobre el estado de los miles de bidones con residuos nucleares que entre 1949 y 1982 fueron vertidos en diversos puntos del océano, en la conocida como Fosa Atlántica.

Nadie está vigilando de manera periódica el estado de aquellos bidones, algunos de los cuales llevan ya más de 70 años bajo el mar. Tampoco se está midiendo la radiactividad en los puntos de vertido, en aguas internacionales, pero los estados miembros de la UE sí tienen el deber de vigilar la radiactividad en sus aguas costeras. Tras varias preguntas al respeto, la Comisión Europea acabó respondiendo hace ahora casi un año al socialista José Blanco que en este 2019 pondrían el foco en cómo España está cumpliendo con su deber de vigilar la radiactividad en las aguas costeras gallegas.

Aquella declaración política tardó en concretarse y la costa gallega fue incluida finalmente en el programa de misiones de verificación de la Comisión Europea correspondiente a 2020. Ahora, tras una pregunta al respecto de los eurodiputados Pernando Barrena (EH Bildu) y Diana Riba (ERC) -socios del BNG en el Parlamento Europeo- la Comisión Europea ratifica que 2020 será el año de esa supervisión, pero que aún está negociando las fechas concretas con España.

“La Comisión desea confirmar que ha incluido la verificación de la vigilancia de la radiactividad del medio marino en la costa de Galicia en su programa de misiones de verificación de 2020”, dice la respuesta en nombre de la Comisión firmada por el aún comisario de Acción por el Clima y Energía, el popular español Miguel Arias Cañete, que añade que “las fechas de la misión de verificación están siendo negociadas con las autoridades españolas”.

Esta nueva respuesta de Arias Cañete confirmando que supervisará el próximo año cómo España analiza la radiactividad en la costa gallega se produce después de que, a preguntas previas del socialista Blanco, admitiese que la Comisión Europea desconoce el estado de los residuos vertidos en aguas internacionales o su impacto en el medio. La Comisión Europea también había respondido previamente que no considera necesario nuevos estudios sobre esos bidones de la Fosa Atlántica y que el Estado español no le había trasladado ninguna necesidad al respecto ni tampoco ningún incidente en sus análisis periódicos sobre la radiactividad costera. Análisis que ahora van a ser supervisados por la propia Comisión.