Pontón recrimina a Rueda que gobierne contra los gallegos mientras organiza “actos bochornosos para dar las gracias al gran líder”

El discurso de Ana Pontón, líder del BNG, en el debate de política general fue sobre todo contra los rasgos neoliberales que la también líder de la oposición parlamentaria detecta en el gobierno de Alfonso Rueda. Lo dejó claro casi al principio de su turno de 45 minutos: “Usted se proclamó servidor de Galicia pero es servidor de Altri, de las eléctricas, del negocio con la sanidad y la vejez, de las empresas amigas de familiares del PP que riega con contratos a dedo”. A partir de ese punto, retrató un presidente que “gobierna contra los gallegos” al tiempo que organiza “actos bochornosos” en los que la gente “da las gracias al gran líder por los derechos que reparte”. “Esto es el ruedafeudalismo”, añadió. Pontón acusó a Rueda de deslealtad, salpicó de propuestas su intervención y recordó que, en el turbulento contexto mundial, el BNG “está del lado de la paz y del antimperialismo”.
“La pregunta que hay que hacerse es si Galicia está ahora mejor qué hace 16 años”, afirmó. Fue en 2009 cuando Alberto Núñez Feijóo ganó contra pronóstico la primera de sus cuatro mayorías absolutas en Galicia. Alfonso Rueda formó parte de la cúpula de todos sus gobiernos. El año pasado, con Feijóo en Madrid tras orquestar junto a Ayuso la defenestración de Pablo Casado, fue Rueda el que obtuvo el respaldo electoral. Pontón resumió el período con dos cifras: mientras la población del Estado creció en dos millones, la de la comunidad descendió en 90.000 personas. “Es la imagen de una Galicia paralizada, estancada, arrastrada por un gobierno sin proyecto que conduce con el freno de mano, desprecia la riqueza del país y la vende al mejor postor”, sintetizó.
Altri compareció de nuevo. Según la nacionalista, la Xunta favorece la entrada de multinacionales y grandes lobbys -citó el eléctrico, el minero y el forestal- y redacta leyes que “desprotegen las personas, el territorio y el medio ambiente, le hacen greenwashing nada menos que a una macrocelulosa”. Algunas de las mayores movilizaciones ciudadanas de los últimos tiempos han tenido como objeto las políticas ambientales del Gobierno gallego, insuficientes cuando no directamente contrarias a lo necesario, a decir de casi todos los colectivos ecologistas. “No consigue ni un solo proyecto tecnológico de futuro, solo lo que los demás no quieren, propio del franquismo industrial y no del siglo XXI”, insistió, de nuevo en referencia al proyecto de macrocelulosa que la compañía portuguesa -asociada con la gallega Greenalia, en cuya dirección está la ex conselleira del PP Beatriz Mato- pretende materializar en Palas de Rei (A Ulloa, Lugo). El plan ha sufrido este miércoles un revés, al publicar este periódico que el Gobierno central no concederá a Altri los 30 millones de euros en ayudas que solicitaba por descarbonización.
Todo sucede en un panorama económico en el que, recordó Pontón, tras 16 años de gabinetes del Partido Popular, la convergencia de Galicia con Europa en PIB per cápita no se ha producido. “Perdemos posición en competitividad. La tasa de inversión es la mitad que hace 15 años. No atraemos capital y el ahorro se marcha. El empresariado no confía en su gobierno”, llegó a afirmar.
La motosierra en la sanidad pública
Pontón también se detuvo en otro de los núcleos del malestar social en Galicia, la situación de la sanidad pública y, en concreto, de la atención primaria. “Usted ha metido la motosierra en la sanidad”, atacó, “un recorte de 2.000 millones en primaria, hay 11.000 niños sin pediatra y listas de espera para ver al médico de cabecera”. Mencionó un dato extraído del último informe del Consello de Contas, un órgano consultivo de la Administración autonómica: los conciertos con la sanidad privada han crecido un 19% desde 2019. El sobrecoste de 470 millones en la construcción del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo -debido a la decisión de Feijóo de privatizar su financiación o la falta de psicólogos también forman parte de lo que -entiende la líder del BNG- es un proyecto ideológico del Partido Popular.
“Cuando saca la motosierra lo hace por ideología. Nuestra alternativa pasa por lo contrario, el rescate de la atención primaria, un nuevo plan de salud mental, un plan de choque para reducir las listas de espera y acabar con la precariedad en la sanidad pública”, dijo. Lo mismo sucede con las residencias de mayores, dijo, “ni una sola plaza pública en 16 años” o con el colapso de los servicios de ayuda en el hogar. “¿Sabe cuántas personas murieron en los últimos siete años esperando por la dependencia? 7.045 personas”, aseguró, antes de lanzar otra andanada contra “las promesas vacías que no solucionan problemas”. Uno de esos problemas que no soluciona es, a su juicio, el de la caída en el uso del gallego. “¿Qué problema tiene usted con el gallego? ¿A qué viene su política de acoso?”, dijo, antes de ofrecer un acuerdo para cumplir el Plan Xeral de Normalización Lingüística, aprobado en 2005 por unanimidad parlamentaria y del que el PP de Feijóo se descolgó unilateralmente, y derogar el decreto que redujo la presencia en la escuela del idioma propia de Galicia.
Ana Pontón enfiló el tramo final de su discurso advirtiendo a Rueda de que no confundiese mayoría absoluta con absolutismo. El rodillo parlamentario, el “barrizal que trae la crispación de Madrid” a la Cámara gallega o el desprecio hacia las personas que participan en las manifestaciones fueron algunas de las actitudes que afeó al presidente de la Xunta de Galicia. “Usted puede equivocarse pero no traicionar un país. Tuvieron la oportunidad de transformar este país durante 16 años y lo que tenemos es un país con menos población, sectores productivos disminuidos y donde crecen las listas de espera”, concluyó.
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