El PP gallego recupera como candidata a la alcaldesa a la que expulsó por colarse para la vacuna de la COVID

Cuando la campaña de vacunación contra la COVID-19 estaba empezado y había dosis contadas que se destinaron a inmunizar a los mayores en las residencias, la alcaldesa de Boimorto, un pequeño municipio cercano a Santiago, María Jesús Novo, recibió también la inyección, aunque todavía no era su turno. Con la tormenta desatada, el Partido Popular la suspendió de militancia. En sus declaraciones, los cuadros del partido le dieron la espalda, pero en el ayuntamiento siguieron apoyándola entonces y todo este tiempo. Ahora la formación conservadora la recupera como candidata para las elecciones municipales de mayo de este año. No se ha vuelto a afiliar al PP, pero no es necesario y será su cabeza de lista. “Es nuestra candidata”, confirman fuentes del partido.

Después de que trascendiese que se había vacunado, a finales de enero de 2021 el PP le abrió expediente a Novo. Ella no tardó en pedir su baja como afiliada. Ya entonces la oposición manifestó sus sospechas de que todos estos movimientos buscaban dar la apariencia de ruptura entre partido y regidora, pero que nada cambiaría en Boimorto, un pequeño municipio cercano a Santiago. En el debate de reprobación de la alcaldesa en medio de la polémica, los concejales del Partido Popular votaron en apoyo de Novo. “Queda muy bonito en los titulares de los periódicos que la alcaldesa de Boimorto abandona el PP, pero lo que no dicen es que siguen en el grupo municipal del PP y que son ustedes los que tienen el poder de desalojarla de la alcaldía”, recriminó Sandra Sánchez, del PSOE. El portavoz del BNG, Xosé Luis 'Mini' Rivas, dio por hecho que la estrategia era la de aparentar un distanciamiento para, “a los dos años”, volverla admitir “y aquí no pasa nada”. El error en su predicción se limita a que la regidora no ha vuelto a darse de alta dentro del Partido Popular.

Desde entonces, Novo ha seguido participando en encuentros a los que están llamados los alcaldes y portavoces del PP en la provincia de A Coruña. En la nota de prensa difundida después de una de estas reuniones, en la que participaron a principios de octubre de 2022 los representantes locales del partido judicial de Santiago, se incluye una foto en la que se ve a la alcaldesa de Boimorto sentada en primera fila. En el centro está el presidente del PP en la provincia de A Coruña, Diego Calvo, también vicepresidente segundo en la Xunta. Es la imagen que acompaña a esta información. En plenos preparativos para las municipales de mayo de 2023, la alcaldesa figuraba sin disimulo en los actos del PP, que calcula las posibilidades de volver a gobernar la Diputación de A Coruña, actualmente en manos del PSOE y el BNG.

Novo recibió la primera dosis de la vacuna en enero de 2021. En aquel momento, el fármaco era un bien escaso y se había establecido un estricto orden para repartir las primeras dosis. Los primeros en recibirla tenían que ser las personas que vivían en residencias de ancianos y los profesionales encargados de asistirlos, además de los equipos de enfermeras que ponían las inyecciones. La Xunta había elaborado listados cerrados en los que se identificaba por su nombre a cada una de las personas que iba a recibir el pinchazo cada día. Los equipos sanitarios llevaban cantidades ajustadas a esas listas para intentar que no se desperdiciase suero. Fue en ese contexto en el que la alcaldesa de Boimorto, no relacionada con la profesión médica y con dedicación exclusiva en el Ayuntamiento, recibió la vacuna. Ella argumentó que su nombre se incluyó en el turno de la residencia municipal porque ella era “personal” del centro. “Tengo una relación laboral porque voy todos los días por allí”, dijo entonces a esta redacción.

En aquellos días se habían conocido otros casos de políticos que habían recibido el fármaco. Alberto Núñez Feijóo, que estaba al frente de la Xunta y del PP gallego, consideró que los cargos que fuesen vacunados fuera del protocolo debían dimitir. Luego les pidió también que, si aparecían en el listado cuando no les correspondía, renunciasen. Fueron las primeras de las muchas declaraciones críticas de su propio partido con la alcaldesa de Boimorto. Siguió la suspensión de militancia. El portavoz parlamentario, Pedro Puy, le pidió incluso que dimitiese como regidora por una cuestión de “ejemplaridad” y que dejase el cargo a alguien que sí hubiese cumplido los códigos de conducta.

La alcaldesa, sin embargo, se mantuvo en el cargo. No solo eso: pese a los mensajes de los responsables del partido a nivel gallego, la realidad fue que siguió recibiendo el apoyo de sus compañeros del PP en el Ayuntamiento para sacar adelante las votaciones. En mayo, la papeleta del PP volverá a ser la de Novo.