El PSdeG-PSOE ha sido el claro ganador de las elecciones municipales en la Galicia urbana No sólo gobernará al menos 5 de las 7 ciudades (o 6, a la espera de lo que pueda suceder en Ourense), sino que en el conjunto de las siete urbes los socialistas han mejorado en un 45% su resultado de 2015, que supuso su nivel más bajo en la Galicia urbana. En total, las candidaturas socialistas rozan los 200.000 votos, frente a los 137.000 de hace cuatro años.
La mitad de esos 200.000 votos corresponden sólo a la ciudad de Vigo, donde el PSOE ha recogido casi la mitad de sus nuevos apoyos para la formación, ganando 28.000 sufragios.
Muy lejos se queda el PP, con poco más de 128.000 votos, lo que supone un nuevo descenso frente a los 136.000 de 2015, convirtiéndose en la cifra más baja para los populares en las ciudades en las últimas décadas. Los populares suben ligeramente en Ferrol, A Coruña y Pontevedra y se mantienen en Lugo y Compostela, pero los cuatro mil votos que pierden en Ourense y los nueve mil que se dejan en Vigo conforman un escenario en el que la formación liderada por Núñez Feijóo vuelve a bajar en las áreas urbanas. Una parte de ese descenso es compensando por el pequeño crecimiento de Ciudadanos, que pasa de 20.515 a 24.703 votos, pero insuficiente para que ninguna gran alcaldía gallega gire a la derecha.
El titular de la jornada fue claramente el desplome de las mareas, que perdieron las alcaldías de A Coruña, Compostela y Ferrol y que en el conjunto de las siete ciudades cayeron de 95.234 a 62.856 votos, un descenso de más de 32.000 apoyos que sólo en parte fue compensado por el BNG, que creció algo menos de 10 mil votos, pasando de 43.077 a 52.659, una cifra que sigue por debajo del nivel de 2011 (67.754) y 2007 (95.617). El ascenso de los nacionalistas se asentó sobre todo en los resultados de Lugo, con un crecimiento de casi cuatro mil votos, y de Vigo y A Coruña, con dos mil votos más en cada urbe.
En las mareas llamó la atención su salida de las corporaciones de Lugo, Ourense y Pontevedra, ciudades en las que en esta ocasión este espacio político se fragmentó en dos o tres candidaturas. Ninguna de ellas llegó al 5% exigido, aunque en conjunto se movieron entre el 6,6% y el 10%, lo que -de haberse presentado unidas- les hubiera garantizado representación, 1 o 2 concejales, ligeramente por encima de Ciudadanos.