Las mujeres que presentaron denuncia ante el juzgado de Vigo por delitos de abuso sexual supuestamente cometidos por un exdirectivo del Colegio Labor de Vigo, Sergio Saborido Comesaña, han confirmado que han recurrido la decisión de la magistrada de archivar la causa, y entienden que los hechos no han prescrito. A través de un comunicado, las denunciantes han señalado que han presentado recurso de reforma (y subsidiariamente apelación) contra el auto de la jueza de instrucción número 7 de Vigo, que acordó el archivo de la causa al entender que el posible delito estaría prescrito.
El recurso presentado argumenta que la fecha que debe tenerse en cuenta para empezar a computar el plazo de prescripción es la de su mayoría de edad, y no el momento en que ocurrieron los hechos (cuando ellas eran unas niñas). “Nuestras abogadas nos han explicado que, cuando hay reformas normativas en la jurisdicción penal, no siempre pueden aplicarse a hechos ocurridos con anterioridad a su entrada en vigor, como medida de garantía para el reo”, apuntan en el comunicado.
Por otra parte, celebran la decisión de la magistrada de dar traslado de los hechos denunciados a la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) de la Policía Nacional. Así, la jueza señala en su auto que ese traslado debe producirse “en la medida en que consta la existencia de una pluralidad de mujeres afectadas por abusos, que dicen sufridos cuando era niñas en el Colegio Labor por parte de la misma persona”, y que puede deducirse que esa persona, Sergio Saborido Comesaña, “pudiera seguir formando parte” de ese centro educativo.
Las denunciantes aplauden esta medida, para que “se investigue” si han podido suceder “hechos similares con posterioridad y que pudiesen no estar prescritos”, al tiempo que han subrayado que su “mayor interés” es “que no vuelvan a ocurrir situaciones” como las que ellas afirman que padecieron.
Archivo
La jueza de instrucción número 7 de Vigo ha dictado un auto en el que acuerda el archivo de la causa porque, aunque los hechos descritos podrían ser constitutivos del delito de abusos sexuales sobre menores de 16 años, dichos episodios ocurrieron, como muy tarde, en el año 2010. Teniendo en cuenta que dicho delito lleva aparejada una pena de 2 a 6 años de prisión, en estos casos estaría ya prescrito en el momento en que se formalizaron las denuncias ante el juzgado.
No obstante, la jueza acuerda dar traslado a la UFAM para que esta unidad policial tenga constancia de las denuncias “a los efectos de la protección de otros/as menores en eventual situación de riesgo”, y teniendo en cuenta “otros eventuales casos que se pudieran producir”.