CIG, CC.OO., UGT, CSI-F, CESM, SAE, Satse y O'Mega se movilizarán de forma unitaria en los próximos días en demanda de más personal para la sanidad pública gallega, denunciando la saturación que sufren los y las profesionales, la precariedad del personal eventual y la “privatización encubierta” que -dicen- se está produciendo. Los ocho sindicatos llevarán a cabo concentraciones este jueves en todos los hospitales gallegos. De igual manera, convocan una manifestación para el jueves siguiente, día 10, a las 11 horas, que partirá del edificio del SERGAS y que terminará ante la sede del Gobierno gallego en San Caetano, coincidiendo con la reunión del Consello da Xunta.
Las centrales sindicales califican de “insuficiente” la oferta de empleo público convocada para este año, un total de 818 nuevas plazas, incapaz de compensar los puestos de trabajo perdidos desde el inicio de los recortes, alrededor de tres mil, correspondientes a trabajadores que se jubilaron y cuyas plazas, por culpa de la tasa máxima de reposición del 10%, no se han cubierto. Desde el 2011 se han perdido un total de 761 plazas de médico/a, 514 de enfermero/a o 547 de auxiliares de enfermería. Un proceso que, para la CIG, constituye “una herramienta perfecta que utiliza el PP para seguir en el camino de la privatización de la sanidad pública”. En este sentido, los sindicatos reclaman una oferta de empleo público que recupere el 100% de las plazas perdidas. Han llamaron la atención, además, sobre “la proliferación de seguros sanitarios privados, que se benefician precisamente de las deficiencias del sistema público”.
“Para tener unos servicios públicos de calidad, se precisa personal cualificado y suficiente” -destacaron- “sin embargo, el gobierno del PP está haciendo todo lo posible para reducir este capital humano al mínimo descuido, eliminando año tras año puestos de trabajo en la sanidad pública”. “Galicia está gastando una importante cantidad de dinero para formar a profesionales que luego acaban emigrando por falta de empleo o por culpa de unas condiciones laborales absolutamente precarias”, denunciaron.
Esta falta de personal sanitario está provocando una merma en el servicio ofrecido a la ciudadanía y, además, una creciente saturación para los profesionales. “La garantía de una idónea asistencia sanitaria sólo descansa en la responsabilidad de los profesionales sanitarios y de su sobresfuerzo continuado. Sobresfuerzos físicos y mentales que están obligados a hacer para tratar de compensar la falta de personal existente y que están constituyendo un riesgo para su propia salud”, señalaba hace días la Comisión de Centro del CHUAC coruñés.
Las carencias están siendo cubiertas (cuando se hace) con sustituciones de escasa duración. En 2014, denuncia la CIG, el SERGAS realizó 100.000 contratos por días. En las listas de contratación de la Consellería están inscritas más de 36 mil personas, profesionales sin plaza fija, que deben ir encadenando sustituciones, sumando en muchos casos muy pocos días de trabajo (y de salario) al año. “Todo lo que se contrata es en precario. En vez de crear plazas interinas, se hacen contratos de 15 días a personas que a los seis meses son sustituidas porque por ley no puedes acumular tantos contratos”, critica María Xosé Abuín (CIG).
La partida de personal en el SERGAS representa el 34,5% del gasto sanitario, una proporción que viene a ser un 24,5% inferior al promedio estatal, según un reciente informe de la Asociación Gallega para la Defensa de la Sanidad Pública, lo que sitúa a Galicia en el penúltimo lugar del Estado, superando únicamente a Cataluña. El año pasado Galicia fue, además, la comunidad autónoma que más recortó en el capítulo de personal, un 30,67% frente a un promedio del 7,9% del Estado. En total, la partida de personal ha descendido un 21% desde 2009: pasando del 43,15% del total del gasto sanitario al ya referido 34,5% en este año.