Como casi siempre, los datos son pocos coincidentes, y es que si a quién se pregunta es a los sindicatos la respuesta es de “éxito rotundo” y seguimiento del 82% (teniendo en cuenta sólo el personal convocado), pero si son las patronales las llamadas a responder la pregunta, Adegi tilda la participación de “escasa”, mientras abre la puerta a la negociación mediante un comunicado, pero advierte que el planteamiento de la Diputación llevaría a muchas empresa a incurrir en pérdidas.
La postura de la Diputación es ahora suscrita por el consistorio donostiarra, que en un comunicado muestra su desconcierto frente a la actitud de “las empresas y patronales que prefieren mantener el conflicto para poder hacer y deshacer a su gusto en contra de las trabajadoras cuando la cuestión económica está resuelta” y llevará el asunto al próximo pleno de este mes de mayo.
Donostia es precisamente la localidad más afectada, con centros en huelga, seguida de Irun con tres. En total son 25 las residencias llamadas a la huelga, ya que según explicaba ayer el representante de ELA, Iñigo Zubeldia, otras 30 ya han firmados acuerdos paralelos para suscribir convenios con los sindicatos.
Las familias preocupadas
Casi 3000 ancianos ocupan los centros llamados a seguir la convocatoria, con lo que miles de familias del territorio guipuzcoano muestran su preocupación como “los grandes afectados del desacuerdo”.
A la puerta de varios centros de la localidad guipuzcoana, los familiares acudían a “comprobar que todo esté en orden”, y dicen notar sobre todo problemas en “la parte ociosa”. Mientras las necesidades básicas siguen cubiertas, las actividades lúdicas de los ancianos, que los familiares consideran “necesarias”, se ven reducidas de manera drástica en muchos de los geriátricos.