Convierte tu casa en un hogar inteligente... sin arruinarte ni ser ingeniero
Tenemos 'smartphones', portátiles, 'tablets', coches, televisores, equipos de sonido... Todo ello está equipado con la más alta tecnología, pero: ¿qué pasa con nuestra casa?
La domótica es el conjunto de sistemas y dispositivos que automatizan una vivienda. El termómetro de la calefacción, el del aire acondicionado, las puertas del garaje... Sin embargo, parece que, pese a todos los avances que ha habido en los últimos años, la tecnología integrada en el hogar no acaba de despegar. Quizá un sistema barato y sencillo de instalar como WigWag solucione el problema.
“Un coche tiene más de 100 sensores, una casa normal apenas llega a diez”. Para paliar este déficit de tecnología ha venido WigWag, un sistema que permite informatizar y automatizar ciertas partes de la casa, de manera que los que vivan en ella no tengan que molestarse en apagar las luces, cerrar las puertas o desconectar la cafetera. La casa lo hará por nosotros. Pese a que ya existen muchas empresas que se dedican a esto, aún no existe un sistema simple que podamos instalar por nuestra cuenta, y que además sea fácil de usar. WigWag usa un sistema de órdenes extremadamente sencillo: si se abre la puerta, avísame con un correo electrónico; si no detectas movimiento, apaga la luz; si percibes calor, enciende el aire acondicionado. No hace falta tener conocimientos de programación ni usar dispositivos complicados, el 'When-Then' simplifica todo eso a una orden de entrada y otra de salida.
¿Cómo funciona?
WigWag cuenta con varios dispositivos identificados por un código QR que hay que escanear con el móvil y la aplicación correspondiente. Una vez identificado el dispositivo, podemos empezar a usarlo. El dispositivo principal dispone de sensores de temperatura, humedad, sonido, vibración, movimiento y luz ambiental. Combinando estos sensores se pueden programar pautas que faciliten las tareas domésticas. Desde encender una luz tenue cuando nos levantamos en mitad de la noche para ir al baño, hasta conocer vía email si alguien ha abierto la puerta de casa. Las posibilidades son infinitas.
Todo ello está construido mediante hardware libre (Arduino) y software de código abierto, con lo que técnicamente cualquiera podría construirse estos aparatos en su propia casa.
Con la aplicación se podrá controlar no solo el comportamiento de los sistemas, sino la información de la que queremos que nos provea (email, SMS, Twitter...) haciendo así que nuestra casa sea más autosuficiente y cómoda para sus habitantes.
¿por qué es buena idea?
Muchos creen que tener el control manual de las cosas es más sencillo y práctico, y es posible que no estén equivocados, pero cosas como el limpiaparabrisas y las luces automáticas de los coches, o el regulador de temperatura del aire acondicionado, son imprescindibles a día de hoy. Es posible que en unos años nadie entienda por qué hay que pulsar un interruptor para encender la luz de una habitación o por qué hay que revisar si todas las puertas de la casa están cerradas si lo puedo saber tan solo echando un vistazo a mi móvil. La domótica podría ser la siguiente revolución tecnológica que cambie definitivamente nuestras vidas.
Este proyecto de Kickstarter ya ha recaudado más de 200.000 dólares cuando aún quedan 19 días para que termine la campaña y el objetivo eran solo 50.000. WigWag ya es un éxito. Parece que a los usuarios les atrae la idea de tener el control de su casa en su 'smartphone'.