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Javier Sanz Fernández (Madrid, 1949) asumió la presidencia de la Autoridad Portuaria de Balears (APB) hace poco más de un año. Desde entonces se encuentra inmerso en dos grandes proyectos destinados a cambiar la imagen de la capital balear: la remodelación del Paseo Marítimo de Palma, cuyas obras acabarán en la próxima Semana Santa, y la reordenación de usos del puerto de la ciudad, que cuenta con unas líneas maestras consensuadas con la sociedad civil y aprobadas por unanimidad por el Consejo de Administración de la APB y que podría estar lista, siendo “optimistas”, en “cuatro o cinco años”, según Sanz.
“Queremos una ciudad totalmente distinta y más moderna. El ciudadano va a poder disfrutar cuando tenga una acera mucho más grande y pueda pasear y ver el mar. Igual la mejor solución sería que el Paseo Marítimo fuera peatonal. Pero esto ya es un paso de gigante”, comenta este licenciado en Económicas. Asimismo, el proyecto que afecta al puerto incluye el aumento del espacio destinado a peatones, bicicletas y zonas verdes (del 50% al 70%) y la reducción de las zonas de tráfico rodado (del 50% al 30%). “Vamos a hacer un museo marítimo, una escuela de vela y piragüismo, nuevos paseos, etc.”, enfatiza.
Sanz, que fue el presidente del Real Club Náutico de Palma y actualmente preside la Real Federación Española de Vela, atiende a elDiario.es en la sede de la Autoridad Portuaria, que en los últimos años ha capitalizado titulares por el conocido como 'caso Puertos'. La Justicia investiga si la antigua cúpula del organismo favoreció al Club Náutico de Ibiza para que continuase con la explotación del puerto de la isla. Sanz reconoce que esto “ha deteriorado un poco la imagen de la Autoridad Portuaria”, pero defiende que el caso está judicializado, que hay que “respetar la justicia” y que, aunque “la visión de la gente es que se ha favorecido al Club Náutico de Ibiza”, él cree que “no es así”.
La Autoridad Portuaria gestiona cinco puertos de interés general de los 44 que existen en España. Dos en Mallorca, uno en Eivissa, uno en Formentera y otro en Menorca. Sin embargo, y a pesar de la importancia del sector náutico en las Islas, todavía resulta una entidad desconocida para muchos ciudadanos.
Es verdad. Uno de nuestros objetivos es darnos a conocer. La Autoridad Portuaria es una institución totalmente desconocida en Baleares. Somos culpables de ello porque no hemos sabido comunicar la importancia que tienen las zonas portuarias. Es una institución vital para el desarrollo de la actividad socioeconómica de las Islas Baleares.
La entrada de mercancías es una de nuestras principales razones de ser. El 90% de las mercancías que entran en Baleares lo hacen por el mar. Esto tiene una importancia vital. Otra misión importantísima es la conectividad de las Islas con el exterior. Tenemos que ser conscientes de buscar la eficiencia, la eficacia y, sobre todo, la seguridad. También es muy importante el apartado socioeconómico a nivel de productividad, mano de obra, etc., en definitiva, nuestra contribución al PIB. Estamos comunicando todo esto y también estamos trabajando en muchos proyectos, como la reordenación del puerto de Palma.
Habla usted de esta reordenación de usos del puerto de Palma. ¿Qué implica este proyecto?
En el puerto de Palma, la primera entrada que tenemos son los ferris, la entrada de mercancías y de pasajeros. Otra parte importante es la zona industrial, que llamamos de reparaciones de embarcaciones. Tenemos otra zona también importante, que es la náutica deportiva: la de los clubs náuticos y el club de mar. Y, por último, la zona de Pelaires, la de los cruceros. Es decir, el puerto de Palma tiene cuatro ejes.
Nosotros tenemos que ordenar el puerto de Palma para que no haya conflictos. ¿Qué nos encontramos? Había un plan aprobado en 2022, validado por el Consejo de Administración de la APB, que estipulaba que todos los ferris tenían que operar en la zona del dique del Oeste. Estudiamos con mucho detalle este proyecto y vimos que era complicado por un problema de simultaneidad en la entrada de los pasajeros. Los barcos llegan a las 6 de la mañana, lo hacen rápidamente, distribuyen la mercancía y el mismo día se van a cargar. Y, por un problema de seguridad y de costes de materia prima, no todos pueden entrar al mismo tiempo. Era inviable. Entorpeceríamos todo el modelo logístico.
Aquí nos planteamos el cambio de usos. Dijimos: los ferris van a seguir operando en las cuatro zonas que tenemos, con lo cual ganamos eficacia y seguimos trabajando. Y aprovechamos para hacer la remodelación del puerto de Palma en la zona industrial. El proyecto consiste en la integración del puerto a la ciudad. Buscamos espacios en la zona industrial para salir al dique del Oeste, donde hemos hecho una obra importante, y dentro de la zona comercial dejamos una parte para los ciudadanos, para que disfruten de su puerto.
Como comenta, una de las principales apuestas es la integración del puerto con la ciudad de Palma. Por ejemplo, tienen planeado llevar la zona industrial, que está enfrente de la Catedral, a la zona del dique del Oeste, por Porto Pi. ¿En qué consiste esta visión de “integrar el puerto a la ciudad”? ¿Qué planean hacer en esta zona industrial que ahora pasará a ser más “ciudadana”? Hablan de, por ejemplo, crear una escuela municipal de vela o una FP Náutica.
El puerto de Palma ahora mismo está cerrado. Con este proyecto, recuperamos una parte para la ciudad. Nuestra obligación es recuperar espacios para la ciudad, espacios que están obsoletos o deteriorados, para que la gente disfrute del puerto. Lo vamos a enfocar en el deporte y la cultura. Por ejemplo, vamos a hacer un museo marítimo, una escuela de vela y piragüismo, nuevos paseos, etc. Vamos a empezar a crecer y a recuperar espacios. El objetivo es que el ciudadano disfrute de la ciudad y que esta se modernice.
La remodelación de usos del Puerto de Palma consiste en la integración del puerto, que ahora mismo está cerrado, a la ciudad. Lo vamos a enfocar en el deporte y la cultura. Por ejemplo, vamos a hacer un museo marítimo, una escuela de vela y piragüismo, nuevos paseos, etc. El objetivo es que el ciudadano disfrute de la ciudad y que esta se modernice
Es un proyecto que nace de un proceso participativo en el que han sido consultados más de 65 grupos (Astilleros de Mallorca, la Asociación de Clubs Náuticos de Baleares, PIMECO-PIMEM, CAEB, ARCA, la Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo, los diferentes grupos parlamentarios de la Cámara balear, el Fòrum de la Societat Civil, etc.). Además, el Consejo de Administración de la APB lo aprobó por unanimidad hace un mes. ¿Cómo han ido las reuniones?
Queremos informar, escuchar y participar. Es nuestra cultura. Nos hemos reunido con grupos de interés que tienen que opinar sobre el puerto de Palma. Nosotros tenemos un proyecto y hemos tenido un proceso participativo para escuchar a todo el mundo y sacar conclusiones. La gente ha entendido que recuperar el puerto para la ciudad es interesante. También se ha puesto alguna objeción clara -por ejemplo, alguien reclama un parking o un bar-, pero realmente hemos escuchado mucho y, al final, hemos tomado la mejor decisión con un consenso mayoritario. Ha sido una labor dura, pero creo que gratificante para todos nosotros.
¿Cuál es el siguiente paso? ¿Qué fechas tienen en mente?
Tenemos que obtener los permisos, sacar a concurso las obras, contratar a los constructores, etc. Es una labor bastante larga. Soy muy optimista y me planteo cuatro o cinco años. Pero durante este periodo vamos a intentar que se pueda hacer un trasvase de usos de un sitio a otro. Va a ser un periodo también de ir cediendo espacios e ir colocando a la gente. Empezaremos a trabajar en conjunto y simultáneamente con las obras. Un proceso que dure más de cuatro o cinco años... cambia ya el proyecto, se queda obsoleto. Dentro de poco podremos ir fijando fechas y acertar más en los plazos. Yo te lo digo como un sentimiento, nada más. No tengo ningún dato.
¿La reordenación no afectará a los cruceristas?
No. En el puerto de Palma tenemos tres áreas: el dique del Oeste, donde implantaremos toda la zona industrial, la zona Pelaires, donde seguirán llegan los cruceros -aunque existe una limitación diaria-, y una zona comercial.
Comenta usted el acuerdo voluntario de las navieras con el Govern, en el que la APB no interfiere, que estipula que solo pueden llegar en el mismo día a Palma un total de tres cruceros. A menudo, las entidades ecologistas y ciudadanas señalan a los cruceros como uno de los factores que produce masificación turística. ¿Qué opina la APB sobre las manifestaciones y las quejas sobre la saturación que generan los cruceros?
Lo entendemos como ciudadanos. Hemos oído de todo dentro de las más de 65 entrevistas que hemos tenido: gente que quiere más cruceros, otros que no los quieren… No entra dentro de nuestras posibilidades. Nosotros intentamos ofrecer un servicio excelente. Somos gestores de espacios, no decidimos si vienen cruceros. Somos operadores portuarios, si viene un barco, tenemos que recibirlo, no podemos decirle que no venga porque hay mucha gente. Estamos al margen. Es evidente que hay más turistas y más coches y el Govern ya ha iniciado la Mesa para el pacto social por la sostenibilidad en Baleares para tomar decisiones.
Somos gestores de espacios, no decidimos si vienen cruceros. Somos operadores portuarios, si viene un barco, tenemos que recibirlo, no podemos decirle que no venga porque hay mucha gente. Estamos al margen
Además de la reordenación del puerto de Palma, están ustedes también inmersos en la remodelación del Paseo Marítimo. ¿Por qué creen que era necesaria esta obra?
Creo mucho en la alianza pública-privada. Es una inversión financiada por Autoridad Portuaria. El Paseo Marítimo es una arteria muy importante para Palma. Era una zona totalmente deteriorada, ya casi era una autopista. Hemos elaborado un proyecto de mejora del Paseo Marítimo. Estamos contentos. Seguirá remodelándose la arteria. No sé cuando, pero seguro que lo hará. Es un paso de gigante y la parte de tierra ya está acabada. Esto va a mejorar. Generará espacios de hostelería y tiendas.
Una de las finalidades es hacer que el Paseo Marítimo sea más “amable” para los ciudadanos, es decir, que la movilidad de los peatones y el uso de la zona por parte de los mismos sea más favorable. Por ejemplo, con la creación de más pasos de cebra o el aumento del espacio destinado a peatones, bicicletas y zonas verdes (del 50% al 70%). Sin ir más lejos, tienen planificada la plantación de 1.820 nuevos árboles. Esto va en detrimento de los vehículos de tráfico rodado, cuyos espacios se reducen del 50% al 30%. Cuando estén las obras terminadas, ¿cómo afectará en el día a día la reforma del Paseo Marítimo a los conductores de coche y a los peatones?
Vamos a mejorarlo muchísimo, sobre todo en viales, carriles de bicicletas y aceras mucho más grandes. La gente va a poder pasear. Hemos reducido COâ y cambiado la iluminación. Es una mejora importante, sobre todo dirigida al medioambiente. Igual la mejor solución sería que el Paseo Marítimo fuera peatonal. Pero esto ya es un paso de gigante. Lo que era ilógico era mantenerlo como está, deteriorándose constantemente. Esto entra dentro de la remodelación del puerto de Palma, que ya ha empezado por el Paseo Marítimo. Dentro de meses estará acabado. Queremos otra imagen para la ciudad, totalmente distinta y más moderna. El ciudadano va a poder disfrutar cuando tenga una acera mucho más grande y pueda pasear y ver el mar.
El Paseo Marítimo era una zona totalmente deteriorada, ya casi era una autopista. Vamos a mejorarlo muchísimo, sobre todo en viales, carriles de bicicletas y aceras mucho más grandes. La gente va a poder pasear. Queremos otra imagen para la ciudad, totalmente distinta y más moderna
¿Cómo van los plazos?
El proyecto está planteado para 28 meses. Como es normal, en todas las obras siempre hay algún retraso por una serie de razones, pero sobre todo por el tema de las infraestructuras subterráneas. Al destapar algo, nunca sabes qué te puedes encontrar. Esto es una obra muy antigua que fueron rellenando como pudieron y ahí se han encontrado con muchas dificultades. Eso retrasa un poco la obra. Pero estamos contentos porque en Semana Santa estará totalmente lista. Así, nos quitamos la losa de que en verano tengamos otra vez obras, que causan molestias a los ciudadanos y comerciantes.
Las obras del Paseo Marítimo estarán acabadas en Semana Santa. Así, nos quitamos la losa de que en verano tengamos otra vez obras, que causan molestias a los ciudadanos y comerciantes
Usted ha sido presidente del Real Club Náutico de Palma. Los clubes náuticos son, en teoría, entidades sin ánimo de lucro que buscan potenciar el deporte de vela y el piragüismo desde la base. Sin embargo, los clubes están preocupados porque cada vez más puertos de las Islas caen en manos de marinas mercantes, empresas que están pujando por hacerse con las adjudicaciones de las concesiones. Incluso, los clubes aseguran que están en un camino que les llevará a la desaparición: la pérdida de las licencias deportivas, aseguran, se va a traducir en “la desaparición de regatas que hoy están plenamente consolidadas”, lo cual también cerraría “el acceso al mar a los residentes”. ¿Qué opina sobre este modelo?
Somos gestores de un espacio público de interés general. En el interés general caben todos: grandes yates, clubes sociales y náuticos, pesca, industria…. Un club náutico cumple una función social importante, sobre todo de cara al deporte. En la ley queda reflejado que tienen unas condiciones especiales en cuanto a concesiones en comparación a una marina. La APB es consciente de su situación y vamos a contemplar su filosofía y su labor. No podemos saltarnos la ley ni favorecerles. Si tienen la concesión durante 20 años, no la pueden tener 40.
Esta circunstancia está vinculada a una de las noticias que más ha perseguido a la Autoridad Portuaria en los últimos años: el procesamiento judicial de la antigua cúpula de la APB y de una abogada del Estado por el amaño de contratos a favor del Club Náutico de Ibiza. Están acusados de favorecer al Club Náutico para que tuviera la concesión del puerto de la isla -el Club Náutico de Ibiza ocupa este dominio público desde 1927-. Usted asumió el cargo hace un año, es un caso que involucra a la dirección del expresidente Joan Gual de Torrella, también imputado, pero, ¿cómo afecta a esta situación a la imagen de la APB actual?
Es el famoso caso Puertos, que nos ha desbordado. Ha deteriorado un poco la imagen de la Autoridad Portuaria. La visión de la gente es que se ha favorecido al Club Náutico de Ibiza. Yo creo que no es así. Está judicializado. Respetamos la justicia. Ahora el Club Náutico está gestionando la explotación con una autorización temporal de máximo tres años y después lo sacaremos a concurso y podrá optar a él cualquiera.