El PP balear abre la puerta a separar a los alumnos que estudian en castellano de los de catalán para contentar a Vox

Angy Galvín

Mallorca —
24 de octubre de 2023 11:17 h

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El Parlament ha vuelto a ser testigo este martes de un tenso pleno protagonizado por los reproches entre PP y Vox, enfrentados desde hace una semana por el calendario para desarticular el catalán como lengua principal de la escuela pública balear. Si la semana pasada Vox decidió votar el contra del techo de gasto para vengarse del Ejecutivo balear del PP, lo cual ha generado una fuerte crisis de gobierno, esta semana la ultraderecha ha ido directa contra el PP en la sesión plenaria.

La diputada Manuela Cañadas (Vox) ha sido la primera en arremeter contra sus socios de gobierno -todos los consellers del Ejecutivo balear son del PP, pero los conservadores necesitan los votos de la ultraderecha para sacar adelante sus propuestas parlamentarias-. Cañadas ha recriminado al PP sus declaraciones sobre que no quieren separar a los niños por aulas en función de la lengua: “No dejan claro si van a hacer como Francina Armengol y poner a nuestros menores pinganillos en las aulas”.

Pero lo cierto es que el PP no ha dejado claro cómo implementará la medida sin separar a los niños según el idioma en el que estudian. Ni a Vox ni a la oposición. “O hacen centros segregados en castellano en catalán o hacen aulas segregadas”, ha lamentado la diputada socialista Amanda Fernández. El conseller de Educación, Antoni Vera, simplemente ha comentado que “el Govern pondrá el marcha el derecho de las familias de acuerdo con la normativa y la colaboración de todos los argentes implicados”.

“Ya se desdobla por optativas. ¿Acaso escoger una u otra operativa es segregación?”, ha preguntado Idoia Ribas (Vox), quien defiende una línea educativa en castellano y otra en catalán. “Nos sorprende el conseller diciendo que a los niños no se les va a separar por lengua”, ha añadido la diputada de la ultraderecha.

“No aplique la segregación lingüística en las aulas, no separe a los alumnos por motivos lingüísticos, no vaya en contra de los criterios de los docentes, pedagogos y familias”, ha pedido Lluís Apesteguia (Més per Mallorca) a Marga Prohens (PP). La presidenta balear no ha querido descartar en ningún momento que vayan a aplicar esta segregación lingüística -de hecho, ha dicho que no le gusta este término- y se ha dedicado a criticar los “pactos con Bildu” del PSOE a nivel nacional.

Vox, contra el PP

“Nosotros tenemos un acuerdo de gobernabilidad, que permitió la investidura de Marga Prohens (PP). No somos gobierno y su actitud nos impide ser socios, nos deja en la oposición”, ha recriminado Cañadas al conseller Vera. “No tenemos claro que quiera implementar la libre elección de lengua por sus declaraciones y por su miedo a los sindicatos nacionalistas. Usted ha bloqueado con su miedo a la calle [a las manifestaciones] que los niños estudien en su lengua materna. Estaba en sus manos la libertad y ha elegido ser rehén de la izquierda”, ha añadido.

Interpelado por la ultraderecha, Vera se ha limitado a defender que el PP ha cumplido con los acuerdos con Vox y que “lo hará en el resto de la legislatura”. Para justificarse ante Vox por no implementar ya la eliminación del catalán en la escuela, el conseller ha dicho que cuando llegaron al Govern en julio se encontraron “con un curso por comenzar y con muchas necesidades sin cubrir, como la falta de especialistas o problemas de transporte escolar”.

Sin embargo, Vera ha apuntillado que en este curso trabajarán para que en el próximo “los derechos de las familias sean una realidad”. “Pondremos los fundamentos necesarios [para la ”libre elección de lengua“]. Se iniciará en Infantil e irá consolidándose año tras año al resto de cursos educativos”, ha explicado el conseller. El acuerdo de 110 puntos entre PP y Vox para gobernar en las Islas sólo recoge que acabarán con la inmersión lingüística antes de que acabe la legislatura.

La polémica PNL de Vox

La ultraderecha presentó la semana pasada una Proposición No de Ley (PNL) con la que pretendía garantizar la “libre elección de lengua” (castellano o catalán) en educación infantil y primaria desde el próximo curso y que la medida se extendiera al resto de etapas educativas a partir del año 2025. Vox ha hecho de la escuela pública en catalán uno de sus principales temas de debate, ya que es consciente de que es uno de los pilares fundamentales para garantizar la pervivencia del catalán, que está en claro retroceso en comparación con el castellano en las Islas.

El PP está de acuerdo con eliminar la inmersión lingüística en catalán, pero no con el calendario que le quiere imponer Vox. Los populares afirman que es la Conselleria de Educación que ellos dirigen la que, después de hablar con la comunidad educativa, implementará todo el proceso. Los conservadores están seguros de que este movimiento en contra del catalán no les pasará factura, a pesar de que en la legislatura del popular José Ramón Bauzá (2011-2015) ya sufrieron una gran manifestación en contra cuando quisieron implementar un sistema trilingüe (castellano, catalán e inglés) en la escuela.

El Gobierno de Prohens tiene, de momento, sus primeros presupuestos autonómicos bloqueados tras la negativa de Vox a apoyar el techo de gasto, un hecho inaudito hasta ahora en las Islas. Més per Mallorca ha ofrecido sus cuatros diputados al PP -y los socialistas han planteado la posibilidad de abstenerse- si rompen su pacto con Vox.

El PSOE también arremete contra el PP

El PSOE ha aprovechado el pleno de este martes para arremeter también contra los consellers del PP. En el epicentro de la polémica, Antoni Vera, el conseller de Educación. “El Govern no hace ninguna concesión, si acaso pacta líneas de actuación de acuerdo con la Constitución y el Estatut”, ha comentado ante las interpelaciones del PSIB-PSOE.

Jaume Bauzà, responsable de Turismo, Cultura y Deportes, ha afirmado que su gobierno “no hace de la lengua una herramienta de confrontación ni división”, cuando el PSOE le ha preguntado “qué coste tendrá pactar para la cultura” de Balears “su pacto con Vox”. “No estamos dispuestos a mercadear con la lengua. No habrá monedas de cambio”, ha sentenciado Bauzà.