El Ayuntamiento de Sant Josep paraliza las obras de la mansión de Messi en Ibiza por no tener licencia

Nicolás Ribas

Eivissa —
5 de septiembre de 2022 17:32 h

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El Ajuntament de Sant Josep (Eivissa) paralizó durante el mes de mayo unas obras que se estaban construyendo sin licencia en una finca de grandes dimensiones, según confirman fuentes municipales a elDiario.es. Según indican las mismas fuentes, las obras consistieron en movimientos de tierras y construcción de nuevos bancales, sin que el Consistorio las hubiera autorizado, ya que la propiedad tiene que redactar un proyecto y pedir la correspondiente licencia de obras a instancias municipales.

“A día de hoy, sabemos que están paradas. La propiedad no pidió en ningún momento autorización, lo que sí hemos encontrado es colaboración”, explican las mismas fuentes a esta redacción.

La mansión, de 16.000 metros cuadrados, es propiedad de la sociedad Edificio Rostower S.L. de Leo Messi, futbolista argentino del Paris Saint Germain (PSG) y ex estrella del FC Barcelona, según avanzó este domingo Periódico de Ibiza y Formentera y ha podido averiguar elDiario.es.

Esta información apunta a que el futbolista argentino compró la mansión ubicada en la zona de Cala Tarida el 3 de febrero de 2022 en un notario de Barcelona por 11 millones de euros, sin licencia final de obra y, por tanto, sin cédula de habitabilidad, lo que a efectos prácticos impide que el propietario pueda dar de alta los servicios de agua y luz.

El motivo es que la mansión, que era legal cuando se pidió la licencia de obra inicial, cuenta con habitaciones en un garaje, motivo por el que el Ajuntament deniega la licencia de final de obra, aseguran fuentes municipales. Y sin licencia de final de obra, el propietario no puede pedir la cédula de habitabilidad al Consell de Eivissa.

La finca tiene habitaciones que no constaban en el proyecto inicial

Sin embargo, según apunta la información avanzada por Periódico de Ibiza y Formentera, los representantes legales del futbolista no eran conscientes de la situación de irregularidad urbanística en que se encontraba la finca cuando la sociedad de Messi decide comprarla. La misma fuente describe la mansión como un espacio de 568 metros cuadrados, con una planta baja de 420 metros cuadrados, sótano de 16,79 metros, anexo de 38,85 metros y piscina de 92 metros.

Para restablecer la legalidad de la mansión, la propiedad tiene que restituirla a su estado previo, es decir, eliminar las habitaciones que se han construido en la ubicación en la que en su proyecto inicial se contemplaba la construcción de un garaje. Además, la propiedad también tiene que eliminar la construcción de los nuevos bancales, que fueron paralizados durante el mes de mayo, después de que llegara la orden mediante un decreto de Alcaldía, previa comprobación del estado de la finca llevada a cabo por los técnicos municipales, afirma el Consistorio.

Cabe recordar que la construcción en suelo rústico común está permitida por la legislación en Eivissa, siempre que la superficie sea superior a los 15.000 metros cuadrados y se disponga de los permisos y autorizaciones correspondientes.

El problema de las viviendas ilegales en Eivissa

Eivissa tiene muchos problemas con la construcción de determinadas obras en viviendas que se llevan a cabo ilegalmente, especialmente en las fincas ubicadas en suelo rústico. A este respecto, Jeffrey Fernández, delegado de los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) en Eivissa y Formentera, explicó a elDiario.es que “los que queremos hacer las cosas bien e informar bien al consumidor, nos encontramos con una competencia desleal, exenta de responsabilidad”.

En este sentido, aseguró que las inmobiliarias que trabajan con rigor “cierran menos operaciones de compraventa como tu profesionalidad te podría permitir porque hay otros que no la tienen, ni tampoco tienen responsabilidad porque el mercado no está regulado”. Por este motivo, Fernández indicó que las administraciones deben promulgar la regulación del sector inmobiliario y la de todos sus agentes intervinientes marcando las responsabilidades de cada uno de ellos.

“Pedimos desde hace muchos años que se regule la profesión, que tengamos un seguro de responsabilidad civil, que el usuario esté protegido para, precisamente, cuando una persona compra un inmueble, tenga las garantías de que si algo se ha hecho mal tengas a quien acudir para exigirle una compensación por el daño causado a raíz de esa información (mal) dada”.