Desde el martes por la noche hasta el miércoles por la tarde, los ataques aéreos de Israel han dejado decenas de víctimas mortales, además de heridos, según distintas fuentes.
La Defensa Civil libanesa, que se encarga del rescate de muertos y heridos, ha recuperado 30 cuerpos de debajo de los escombros de un edificio de apartamentos en la localidad de Barja, tal y como recoje la agencia de noticias AP. El ataque tuvo lugar en la noche del martes, sin aviso previo, según AP.
Barja se encuentra al sur de Beirut y no ha sido un blanco habitual de los ataques israelíes desde que comenzó la ofensiva contra Líbano a finales de septiembre. Su población es mayoritariamente suní, mientras que la aviación israelí ha tenido como objetivo las zonas de mayoría chií, donde el grupo Hizbulá tiene una mayor presencia y apoyo.
Precisamente, este miércoles Israel ha atacado la provincia de Baalbek Hermel, en el este de Líbano y considerado uno de los bastiones de Hizbulá. Al menos 30 personas han muerto y 35 han sufrido heridas en un total de 20 bombardeos israelíes contra la provincia, tal y como ha anunciado su gobernador a través de la red social X. Bachir Khodr no ha ofrecido más detalles.
Por su parte, el Ejército israelí no ha informado de los ataques contra la provincia de Baalbek Hermel, pero sí ha notificiado el lanzamiento de 120 proyectiles desde Líbano contra Israel hasta las 16.00 horas locales (15.00 en España) del día de hoy.
Según la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN), al menos cinco personas murieron en un bombardeo contra el barrio de Al Shaiqan de la histórica ciudad de Baalbek, una población que el Ejército israelí ha ordenado evacuar en múltiples ocasiones en los últimos días.
La ANN, citada por la Agencia EFE, ha indicado que otras siete personas perdieron la vida en la localidad fronteriza con Siria de Mishrifa, donde los equipos de rescate también han contabilizado “varios heridos” y continúan con los trabajos de desescombro, por lo que el número de víctimas mortales podría aumentar.
Por otra parte, un ataque aéreo efectuado a primera hora de la mañana contra la ciudad de Al Ain, en el oriental Valle de la Bekaa, ha provocado otros siete muertos, dos heridos y la “destrucción completa de una casa”, según la ANN.
En las últimas semanas Israel ha intensificado sus bombardeos contra el este del Líbano y contra zonas fronterizas con Siria, alegando que Hizbulá almacena armas y municiones en esa región oriental del país; en el pasado, ha acusado al grupo chií de recibir ese armamento desde Irán, a través de territorio sirio.
A última hora de este miércoles, Israel ha atacado una vez más los suburbios sur de Beirut, que han sido duramente golpeados por la aviación y donde fue asesinado el líder de Hizbulá Hasán Nasrala a finales de septiembre. El Ejército israelí ha informado de que ha atacado “centros de mando, almacenes de armas e infraestructura terrorista en el área de Dahie”, tal y como se denomina la gran barriada al sur de la capital.
Desde octubre del año pasado, cuando Hizbulá e Israel empezaron a intercambiarse fuego casi a diario, han fallecido en Líbano 3.050 personas y más de 13.000 han resultado heridas, la gran mayoría en las pasadas semanas, desde que el Ejército hebreo emprendió su campaña de bombardeos e invadió por tierra el sur del país vecino.