El nuevo primer ministro británico, Boris Johnson, ha llevado a cabo este miércoles una profunda remodelación del Gobierno: ha nombrado a Dominic Raab titular de Exteriores, a Ben Wallace ministro de Defensa -después de que dimitiera Penny Mordaunt-, a Sajid Javid ministro de Economía -tras la dimisión previa de Philip Hammond- y a Priti Patel ministra de Interior.
En una maniobra brutal, Johnson ha despedido a la inmensa mayoría de ministros que tenía su predecesora Theresa May y ha colocado en las principales carteras a sus seguidores y partidarios de una retirada a cualquier precio de la Unión Europea.
El polémico político, que venció a Jeremy Hunt en las primarias conservadoras para suceder a la dimisionaria May el frente del partido y del Gobierno, ha asumido el doble cargo con la promesa inequívoca de cumplir “sin condiciones ni peros” el resultado del referéndum de 2016, que propició la salida del Reino Unido de la UE.
Como ministro de Exteriores está Dominic Raab, que dimitió del Ejecutivo de May por sus presuntas concesiones a Bruselas, y sigue al frente del ministerio para la retirada de la UE el todavía poco castigado Stephen Barclay.
El exbanquero Sajid Javid, hasta ahora en Interior, obtiene el prestigioso ministerio de Economía, mientras que ocupará su vacante Priti Patel, acérrima euroescéptica y cesada anteriormente por conversaciones no declaradas con altos cargos israelíes.
Ben Wallace, que apoyó a Johnson en su campaña por el liderazgo “tory”, se hace con Defensa, mientras que el exalcalde de Londres premia a su amigo y némesis Michael Gove con el puesto de “número dos” del Ejecutivo.
El nuevo primer ministro ha nombrado además asesor personal a Dominic Cummings, el controvertido artífice de la campaña por el Brexit previa al plebiscito de junio de 2016, y sobre la que pendieron acusaciones de que se había caracterizado por el uso de promesas falsas y fue multada por violar la legislación electoral.
Promete un “nuevo y mejor” acuerdo con la UE
En su discurso de apertura en el cargo en la residencia oficial de Downing Street, tras ser investido por la reina Isabel II de Inglaterra, Johnson ha prometido negociar “un nuevo y mejor” acuerdo con la UE, que garantice la salida de este país del bloque y excluya la “antidemocrática” cláusula irlandesa.
Esta cláusula de seguridad destinada a evitar que se erija una frontera física en la isla de Irlanda después del Brexit fue el principal obstáculo para que se aprobara el acuerdo propuesto por May, lo que provocó su dimisión el pasado 7 de junio.
El nuevo jefe del Gobierno aseguró que demostrará a “quienes dudan” y a los “agoreros” “que se equivocan” y que será capaz de lograr un pacto satisfactorio con Bruselas, que ha insistido este miércoles, sin embargo, en que no tiene intención de renegociar el tratado.