El primer ministro de Líbano, Hassan Diab, ha presentado este lunes la dimisión en bloque del gobierno después de que más de un tercio de los ministros dejaran sus puestos. El liderazgo del gobierno de Líbano ha estado tambaleándose durante la última semana desde que una enorme explosión arrasó el puerto de Beirut y dañó las zonas cercanas, matando al menos a 200 personas y causando heridas a otras 7.000.
En un mensaje a la nación, Diab ha sostenido que el Ejecutivo “da un paso atrás para estar junto a la población” y ha defendido que de esta forma “acata la demanda de la población por un cambio”.
El primer ministro ha afirmado que la explosión es “una consecuencia de la corrupción crónica” en el país y ha agregado que “la red de corrupción es más grande que el Estado”, según recoge Europa Press. Además, Diab agregó que lamenta que la clase política libanesa “se resista a través de todos los medios sucios para evitar un cambio”.
“Algunos no han interpretado adecuadamente la revolución del 17 de octubre”, manifestó el presidente en referencia a las protestas que llevaron a la caída del Ejecutivo de Saad Hariri.
La explosión en Beirut se habría producido por la incompetencia de los gobiernos, que no supieron reaccionar a las voces de alarma por el almacenaje de 2.750 toneladas de nitrato de amonio en el puerto junto a sustancias combustibles durante siete años. Además de la gran cantidad de muertos y heridos, la explosión ha dejado a sin vivienda a 250.000 habitantes de Beirut.