España eleva el tono en la OTAN después de que la industria española se haya quedado fuera de una reunión en los márgenes de la reunión de ministros de Defensa. Margarita Robles ha protestado tanto por la vía de los hechos como las palabras. Ha trasladado al secretario general, Jens Stolternberg el malestar por esa decisión y ha plantado a los aliados en ese encuentro. También ha amenazado con bloquear el plan industrial de la alianza que, en plena carrera armamentística, pretende movilizar hasta 1.000 millones de euros.
“España ha decidido hasta que no se reconsideren reuniones como las que ha habido (...) vamos a vetar ese plan de acción de producción de la industria de OITAN”, ha afirmado la ministra española en declaraciones a los periodistas. Ha dicho que se trata de “romper el silencio” en su jerga. “Cualquier cosa, tanto más formal como informal, en relación a la industria de defensa, tiene que contar con España”, ha dicho Robles, muy molesta con la jugada, a pesar de que otros países también han quedado fuera. Robles ha asegurado que Stolternber no le ha dado ninguna explicación sobre esa decisión.
“Espero que esto sea una excepción”, ha afirmado la ministra, convencida de que a partir de este momento “se cuentee con la industria española”. De hecho, ella misma ha tratado de restar importancia al hecho de que no se haya convocado a ninguna compañía española a lo que ha dicho que es “una primera reunión de contacto para ver cuál es el futuro”. “No se va a decidir nada, ninguna actuación”, ha precisado. Bruselas, por ejemplo, sí ha contado con dos empresas españolas (en Albacete y Granada) para la aceleración de la producción de armamento.
Así, Robles pide no dar más “magnitud” a la exclusión, a pesar de que no ha acudido al encuentro y va un paso más allá al amenazar con bloquear el plan industrial hasta que sea “más preciso”. “La industria de defensa española no puede quedar fuera de una reunión de esa importancia”, advirtió Robles: “Es evidente que España tiene que estar; alguna empresa española tiene que estar representada, porque podemos decirlo, y podemos decirlo con orgullo y con satisfacción: la industria de defensa española es una industria de defensa muy buena, que crea mucha innovación, mucha tecnología, que crea muchos puestos de trabajo”.